27 de abril de 2015

Primera Hora

Se compró el auto de sus sueños y como quiere que le dure por muchos años y en buenas condiciones, acepta comprar la garantía extendida que le vende su concesionario, y que en promedio le podría costar $1,500, adicionales al costo del vehículo.

Seguramente piensa que por tranquilidad le conviene tener cobertura por si enfrenta algún percance en cualquier momento.

Sin embargo, ConsumerReports.org advierte que esto, no necesariamente, es una buena opción, aunque el vendedor le dirá que si es necesaria una costosa reparación después de que termine la garantía de fábrica, usted estará protegido.

Una encuesta del Consumer Reports National Research Center (2013) encontró que el 55 por ciento de los que han comprado una garantía extendida no la utilizaron para las reparaciones durante la vida de la póliza; y en promedio, pagaron más por la póliza extendida que lo que invirtieron en las reparaciones.

Entre los encuestados que utilizaron su póliza, la mediana fue que la garantía tuvo que pagar reparaciones por unos $837. Sin embargo, pagaron alrededor de $1.214, por la garantía extendida. O sea, perdieron $377.  Sólo una cuarta parte de los encuestados dijo que definitivamente comprarían una póliza nuevamente.

Hay algunas garantías extendidas, por ejemplo aquí en la Isla, que usted paga $1,495, y le cubre por un periodo de 10 años, incluyendo la garantía que trae el vehículo de fábrica, o las 100,000 millas, lo que ocurra primero.

La publicación web advierte que si se decide a comprar este servicio, esté pendiente a las letras pequeñas. En ellas podría haber algunas limitaciones como el que tenga que llevar su vehículo al concesionario donde lo compró. Si no lo hace podría pagar una penalidad. También podría cubrir ciertas piezas del auto y reparaciones y no todo el vehículo.

ConsumerReports.org sugiere que en lugar de invertir en una extensión de garantía, compre el auto más confiable que se adapte a sus necesidades, presupuesto y gusto, y luego, a cuidarlo bien. A veces esto podría significar que gaste más al comprar el auto, pero la recompensa es, entre otras, un mejor valor de reventa.

Pero, si su se enamoró de un vehículo que todos le han dicho que es un limón, la garantía extendida le puede proporcionar cierta protección.

Ah, y recuerde que si incluye la garantía extendida en la financiación del auto, pagará intereses por los próximo años.