9 de marzo de 2012
The Wall Street Journal
Chris Kemper pensó que estaba soñando cuando se enteró de que su abuela le había heredado US$6 millones en 2010.
Pero su emoción se tornó rápidamente en pavor al darse cuenta de que no tenía ni idea de qué hacer con tamaña fortuna. "Tenía mucho miedo de malgastarla", cuenta la ejecutiva financiera de 44 años y residente de Ohio.
La fortuna repentina es algo que puede tocarle a cualquiera.
Los ejemplos abundan: el artista David Choe aceptó hace cinco años que Facebook le pagara en acciones por unos murales que pintó en las oficinas de la entonces modesta compañía. En unos meses, esas acciones podrían generarle a Choe hasta US$200 millones cuando la red social haga su debut en el mercado bursátil. O Jeremy Lin, el jugador de los Knicks, el equipo de baloncesto de Nueva York, cuyo ascenso meteórico podría generarle varios cientos de miles de dólares en patrocinios de grandes marcas a nivel mundial.
Sin embargo, esas fortunas repentinas pueden desvanecerse rápidamente, dicen los asesores que trabajan con personas que se han convertido en ricos de la noche a la mañana.
Por suerte, hay varias estrategias que pueden maximizar el dinero y prolongarlo, dice Lisa Featherngill, directora de planificación financiera de Abbot Downing, una división del banco estadounidense Wells Fargo que trabaja con clientes adinerados.
La clave, dice Featherngill, es una buena planificación. Ella aconseja conformar un equipo de asesores que incluya a un abogado, un contador y un consejero financiero. Estas son algunas de las recomendaciones que ellos podrían darle:
Tómese su tiempo
Un error de muchos nuevos ricos es actuar por impulsos. Buena parte de las metidas de pata —compras extravagantes e inversiones imprudentes— se cometen en los primeros meses después de recibir la fortuna inesperada. El consejo: espere.
"Tómese un tiempo para hacer una lista de objetivos y determine qué le gustaría conseguir con su nueva riqueza", sugiere Judy Haselton, planificadora financiera de Harmony Financial Advisors, en Nueva York. Algunos expertos incluso aconsejan no tomar ninguna decisión durante los primeros días.
Cuente bien su dinero
Para determinar con cuánto dinero cuenta en realidad, reste de la cantidad bruta impuestos a pagar y deudas pendientes. Antes de hacer una inversión o compras importantes, ponga su dinero en un lugar seguro, como una cuenta de rendimiento alto o certificados de depósito a corto plazo, dicen los asesores. Reserve una cantidad en un fondo aparte con suficiente dinero para cubrir 18 meses de gastos, el cual no tocará hasta que sea estrictamente necesario.
No sea ingenuo
Seguro muchas personas llegarán a usted con ofertas de inversión "que no se puede perder". Si su tío le dice que tiene un negocio magnífico, dígale que tiene que consultar con su asesor financiero.
Richard Hearn, presidente de la firma californiana de asesoría financiera Starcare Associates, les dice a sus clientes que le refieran todas las ofertas de inversión que reciban. Luego les pide a los proponentes un plan de negocios. "En 99% de los casos no recibo nada", cuenta. "Pero es una manera de repeler potenciales malas ideas de inversión".
También existe la tentación de querer ayudar a familiares y amigos. Si decide hacerlo, asegúrese de incluir contratos formales redactados por ambas partes. Prestar dinero de manera desordenada puede destruir relaciones rápidamente. Los consejeros recomiendan que los plazos de los préstamos no excedan los 36 meses.
Planifique su patrimonio
No subestime los impuestos que debe pagar sobre su nueva fortuna. Revise nuevamente su testamento, actualice y verifique quiénes son sus herederos. Si aún no tiene un testamento, establezca un poder, que le permita delegar el manejo de sus finanzas a algún familiar o amigo en caso de que usted se enferme o no pueda tomar decisiones.
Luego, contrate a un abogado que le ayude a planificar un plan de distribución de dinero para sus hijos, nietos y otros familiares, incluido un fideicomiso para familiares menores de edad.
Invierta a largo plazo
Luego de que ha puesto su patrimonio en orden, es hora de concentrarse en su estrategia de inversión para minimizar riesgos y asegurar una tasa de crecimiento razonable.
Quienes se hacen ricos de la noche a la mañana gracias a acciones en una empresa que acaba de debutar exitosamente en la bolsa no deben caer en el error de mantener una gran cantidad de dinero en esa compañía sólo por un espíritu de lealtad. En cambio, reparta su dinero en acciones, bonos y fondos de inversión en bienes raíces, sugiere Jim Steiner, director de Abbot Downing. Debido a que los mercados financieros siguen altamente volátiles, mantenga parte de su fortuna en efectivo para que tenga cierta liquidez disponible, agrega Steiner.
Diviértase
Luego de haber delineado un plan financiero, puede empezar a hacer esas compras con las que siempre soñó.
Kemper, la ejecutiva financiera de Ohio, no sabía qué hacer con su herencia y se rehusaba a gastar. Tom Bentley, su asesor financiero, la ayudó a abrir fondos para proteger su riqueza, al tiempo que la animó a construir finalmente la casa con la que ella y su esposo siempre soñaron.
La pareja decidió erigir una propiedad de cuatro dormitorios por US$502.000. Sólo por puro placer incluyeron una sala de cine y un jacuzzi.
Aprovechando las bajas tasas de interés en Estados Unidos, la pareja decidió solicitar un préstamo hipotecario para el inmueble en vez de pagar en efectivo. "Es muy emocionante", dice Kemper, quien se mudó a su nuevo hogar en julio.
Ahora que tiene un poco más de dinero, Kemper se está dando el gusto de llevar a su familia a todas esas vacaciones con las que siempre soñó pero que antes eran inalcanzables.