15 de febrero de 2019

El Vocero

La tardanza en la llegada de fondos federales a la Isla a comenzado a tener su efecto en las ventas al detal, donde desde el pasado mes de octubre las ventas comenzaron a desacelerarse.

Esta tendencia viene después de un 2018, donde las ventas comerciales habían mantenido una tendencia alcista, logrando alcanzar más de $2,000 millones adicionales en el segmento de las pequeñas y medianas empresas y más de $3,400 millones en las ventas totales. 

Aunque las mismas se mantienen en terreno positivo, por lo pasados dos meses los incrementos de doble dígitos experimentados a lo largo de todo el 2018, ya han comenzado a reducirse. El director ejecutivo de la Compañía de Comercio y Exportación, Ricardo Llerandi Cruz sostuvo que, al haberse detenido el desembolso de los fondos federales, el impacto positivo al sector comercial se ha ido reduciendo, aunque aún permanecen por encima de los tres años previos a 2018, el cual fue anómalo ya que respondió a un repunte significativo producto de los fondos de recuperación, las asignaciones de FEMA y los desembolsos de las aseguradoras.

“Las ventas deben mejorar nuevamente, una vez sigan llegando los fondos federales a la Isla y las empresas sigan expandiendo, anuncios que próximamente se irán haciendo y las cuales traen consigo creación de empleos. Los que no podemos pensar, porque no es real, es que siempre se va a mantener un crecimiento en ventas tan significativo. Esos aumentos no son sostenibles. Lo importante es que los comerciantes capitalicen en este boom y desarrollen estrategias que les permitan seguir manteniendo un ritmo positivo”, afirmó el funcionario.

Con ello coincidió Jorge Argüelles, presidente del Centro Unido de Detallistas (CUD), cuya matrícula ha comenzado a experimentar el descenso en ventas, las cuales reconoce han respondido a las ayudas federales que han llegado a la Isla.

Sin embargo, la apuesta en esos fondos sigue vigente. Ambos entrevistados aseguran que 2019 deberá ser un año muy positivo para la industria, ya que los fondos pendientes traerán consigo la creación de empleo.

Argüelles agregó que, si finalmente se elimina el impuesto al inventario, eso permitirá un alza en los mismos, que igualmente se traduce en ventas. No obstante, hizo un llamado al gobierno, para que tome las medidas que sean necesarias para que el dinero federal se quede en las empresas locales y no se fugue a través de empresas extranjeras. “Si no le facilitan el acceso a esos fondos a las empresas locales, una vez culmine la llegada de los mismos, la industria caerá en una situación igual o peor a la que presentaba antes del paso del huracán María por la Isla”, advirtió.