8 de enero de 2021

El Nuevo Dia

En febrero de 2020, los clientes en espera de contadores eran cerca de 60,000.

Aunque la cifra es más baja que hace 11 meses, poco más de 37,000 abonados de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) están en espera de reemplazo o instalación de un contador o medidor de consumo, confirmó este martes la directora de Servicio al Cliente de la corporación pública, Noriette Figueroa.

 

En febrero de 2020, los clientes en espera de contadores eran cerca de 60,000 y, entonces, la AEE atribuyó el retraso a la escasez de equipos. Ahora, según Figueroa, “hay inventario y tenemos compras en tránsito”, pero la pandemia de COVID-19 y “ciertas circunstancias” han afectado los trabajos.

“Nosotros, en un momento dado, tuvimos escasez porque eran muchos más los reemplazos que había que hacer a causa (de los daños) del huracán (María) y de la operación corriente, que no para. Comenzamos a hacer contrataciones a requerimiento y compras constantes. Ahora mismo, tenemos 35,000 contadores en inventario, que se utilizan tanto para uso diario (servicios nuevos) como para reemplazo de aquellos dañados”, dijo a El Nuevo Día.

La cifra de abonados en espera de contadores se divide en 37,000 para reemplazo y 900 para servicios nuevos. Ambos renglones son de solicitudes a nivel isla. De hecho, una ciudadana se comunicó con este diario para denunciar que, tras haber pagado la fianza para un servicio nuevo, la AEE demoró entre dos y tres meses para hacer la conexión porque no tenía contadores.

“Continuamos haciendo las compras y recibiendo constantemente contadores. Con las compras en tránsito y el inventario que tenemos, ya no debemos tener situaciones como las de aquel entonces (febrero de 2020)”, indicó Figueroa, quien, sin embargo, no pudo estimar cuándo se completaría el reemplazo e instalación de contadores a los clientes en espera. Alegó que podría ofrecer una fecha después del 14 de enero, cuando reciba los planes de trabajo para todo el año que le solicitó a su equipo.

“Según nuestras métricas, el 76% de nuestras actividades de campo se realizan antes de tres días, pero hay ciertas circunstancias que nos afectan”, sostuvo.

Mencionó, por ejemplo, que los trabajos de reemplazo e instalación de contadores se retrasan si hay que hacer una toma nueva entre el poste y la residencia, si hay problemas de acceso (portones cerrados o medidores en marquesinas) o si el cliente no está en la casa. Agregó que, debido a la pandemia de COVID-19, algunas oficinas de la AEE “han tenido que cerrar completas temporalmente” por casos positivos, “lo que ha trastocado los servicios”.

Aun así, Figueroa admitió que la cifra de 37,000 clientes en espera “es alta y deberíamos hacer los reemplazos los antes posible porque, al final del día, es una pérdida para la Autoridad”.

“(A quienes esperan reemplazo) se les está estimando (el consumo). No hay, quizás, la lectura que el cliente espera y que es parte del buen servicio que queremos dar, pero el impacto de María todavía lo estamos sintiendo. Tuvimos que adjudicar una subasta (para la compra de contadores). Todo eso tomó bastante tiempo y detuvo la adquisición de equipos, pero una vez se adjudicó ya estamos fluyendo con las compras”, acotó.