13 de diciembre de 2021

El Vocero

Antes de que acabe esta semana LUMA Energy debe someter ante el Negociado de Energía una nueva solicitud de ajuste en la factura debido a que en los meses de septiembre, octubre y noviembre el precio del barril de petróleo a nivel internacional subió muy por encima del costo para el mismo periodo en años anteriores.

El ingeniero Tomás Torres Placa, representante del interés público ante la Junta de Gobierno de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) explicó que las conciliaciones de gastos de LUMA se hacen cada tres meses. En diciembre toca revisar si las proyecciones de gastos que se hicieron para los meses de septiembre, octubre y noviembre fueron correctas o no.

En caso de que las proyecciones no hayan estado de acuerdo a lo que realmente se gastó -ya sea a la baja o a la alta- corresponde hacer un ajuste.

En el caso más reciente se prevé que LUMA pedirá un aumento debido a que las proyecciones no contaban con un alza tan drástica en el precio del barril de petróleo, que a su vez estuvo enmarcado por eventos y tensiones geopolíticas en los que Puerto Rico no tiene injerencia.

“Antes del viernes LUMA debe someter al Negociado de Energía el estimado de cuánto les costó a ellos ese aumento en el precio del barril de petróleo. Ahí sabremos cuántos centavos por kilovatio hora se va a pedir para cumplir con la conciliación de los gastos”, dijo Torres Placa en entrevista con EL VOCERO.

El ingeniero detalló que se trata de un proceso similar a conciliar la chequera o la cuenta de banco entre los gastos que se tenían proyectados y lo que realmente se gastó. En el caso del costo del petróleo se estima a base de lo que se pagó en años anteriores y los costos históricos.

Dramático aumento

El problema es que entre septiembre y octubre ese precio subió unos $10 cada mes. El año pasado el costo promedio para el mismo periodo fue de unos $70 dólares y en noviembre de este año ese preció se incrementó a $85 el barril.

“Nadie se esperaba esta crisis”, dijo el experto al mencionar que hay tensiones entre Rusia y Ucrania, China y Taiwán, así como la inestabilidad política con la toma del poder del régimen talibán y otros problemas en los países árabes.

En medio de la situación, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) limitó el suplido de petróleo, lo que a su vez aumentó los costos. Eventualmente, eso obligó a Estados Unidos y otros países a abrir sus reservas para estabilizar la demanda del combustible. Sin embargo, el precio ya había escalado.

Sugiere medidas

Torres Placa ya había advertido en reuniones de la Junta de Gobierno de la AEE que Puerto Rico debe prepararse para afrontar situaciones similares porque estos procesos y otras situaciones no previstas seguirán ocurriendo.

Entre otros asuntos, el ingeniero ha propuesto crear un fondo de reserva para que las diferencias entre las proyecciones y el precio real se pague de allí sin que pase al bolsillo de los consumidores. Para ello, la Legislatura debe actuar, indicó.

Otra alternativa es que una vez vuelva a descender el costo del barril se compre combustible por adelantado y por volumen o la adquisición de seguros que respondan en casos similares, que también podrían ayudar a mitigar aumentos no previstos.

El ingeniero dijo que sus propuestas no se han traducido en ninguna acción.

En el caso de la reconciliación pasada LUMA pidió un aumento de $75.8 millones en los que dijo que tuvo que incurrir debido a averías imprevistas en varias unidades generatrices, lo que se sumó a que ya había algunas unidades fuera de servicio por mantenimiento. Eso provocó relevos de carga que dejaron a cientos de miles de personas sin el servicio y obligó a LUMA a activar unidades generatrices “pico” que son las que usan combustible más caro.

Para los consumidores ese aumento se hubiese traducido en 2.49 centavos en el kilovatio hora o cerca de sobre un 16% en la factura.

Luego de evaluar lo sucedido y la petición de LUMA, el Negociado de Energía determinó que el aumento solo sería de .007 centavos entre octubre y diciembre.

Eventualmente, el gobernador anunció que se destinaría $78 millones procedentes de los fondos federales ARRA para paliar la crisis provocada por la pandemia de covid-19, para absorber el costo de los $75.8 millones en combustible en que incurrió LUMA.

Aunque para Torres Placa es obvio que la reconciliación concluirá en que hubo un gasto mayor al proyectado, el Negociado de Energía no quiso adelantar qué determinará hasta que LUMA someta formalmente los datos.

El panorama incierto y volátil sobre los costos de energía hace más patente que nunca la necesidad de que Puerto Rico se mueva hacia su independencia en la generación de energía y eso se va a lograr adelantando los proyectos de energía renovable, dijo Torres Placa.

“Si no hay energía la crisis que tendríamos sería insalvable. Por eso es importante entender esto. Debemos movernos a trabajar con más fuerza los proyectos de energía renovable que además de los beneficios a nivel ambiental es, además, un tema de subsistencia ante los tiempos inestables que vivimos. Urge la autosuficiencia energética”, declaró.