El Nuevo Dia
Si usted es uno de los muchos individuos que registran millajes astronómicos para ahorrarse unos chavitos en los gastos del carro, o si creía que podría incluir la escapada de fin de semana a Nueva York como “gastos de representación” en la planilla, piénselo dos veces porque el Departamento de Hacienda se propone intensificar sus esfuerzos de fiscalización antes de tener que establecer nuevos impuestos para cuadrar el presupuesto.
Y si usted también contaba con que el ajuste escalonado de tasas aprobado con la reforma contributiva continuará beneficiándole este año, prepárese para no ver muchos cambios en su bolsillo.
Esos fueron algunos de los temas discutidos en el concurrido foro contributivo del Colegio de Contadores Públicos Autorizados (CPA), evento que, según su presidente, Kenneth Rivera, sirvió para constatar que los cambios de administración contributiva que ansiaba la clase contable no necesariamente se dieron. Y tampoco habrá grandes impactos desde el punto de ahorros a la hora de pagar impuestos.
A manera de recordatorio, el nuevo código redujo a tres las clasificaciones de los contribuyentes: individual, casado, y casado que rinde por separado.
Asimismo, modificó el número de escalas de tributación y, este año contributivo, las tasas aplicables son: 7%, 14%, 25% y 33%. El objetivo del nuevo código, si es que se dan los factores para la segunda etapa de implementación, es que en el 2016 la tasa máxima en individuos sea 25%.
El código también otorga el beneficio para pensionados, que entró en vigor el año pasado y que se emitirá nuevamente este año para quienes lo soliciten.
Según Rivera, si bien en este año, los cambios contributivos que entran en vigor parecen ser mínimos y, en el mejor de los casos, compensarán el aumento en el Seguro Social, en los próximos meses se implantará un mar de reglamentos que abarcan desde las cuentas de retiro individual hasta la famosa contribución alterna mínima.
Menos retenciones
El nuevo Código de Rentas Internas eximió del pago de contribuciones por ese concepto a personas con ingresos menores de $20,000.
En el caso de los asalariados, el alivio contributivo se obtiene particularmente a través de menos retenciones. O sea, que el patrono tendrá que quitarle menos de su cheque para enviarlo a Hacienda.
Para este año, la nueva tabla de retenciones, que tomó vigencia en enero, implica que los patronos tendrán que hacer ajustes en sus trámites, pero no necesariamente se notarán en su cheque. Por ejemplo, si usted se gana $250 a la semana y recibe un pago semanal, el patrono le retuvo en el 2012, el 7% menos $12.10. Este año, su retención será 7% menos $8.80.
“En muchos casos, es cierto: la gran mayoría de las personas pagará menos, pero no será un cambio importante”, indicó Rivera.
El presidente de los CPA recordó que, de producirse algún alivio por esa vía, es muy probable que el contribuyente ni siquiera lo note. Esto porque, a partir de este año, terminó la reducción de 2% en el pago del Seguro Social. A partir de este año, el asalariado regresó a pagar 6.2% a ese programa federal.
Si trabaja por su cuenta...
De acuerdo con el contador, otro elemento esencial ha sido la delimitación de gastos de representación o las deducciones por gastos operacionales.
Rivera sostuvo que, aunque no hubo cambios muy significativos, la toma de deducciones no podrá hacerse si el contribuyente no justifica sustantivamente las reuniones, almuerzos o viajes que realizó para fines de trabajo o de negocio.
El contribuyente no tiene que remitir a Hacienda la evidencia de tales gastos pero, según Rivera, habida cuenta que la agencia será más rigurosa en el proceso de levantar y corroborar datos financieros de los contribuyentes, más vale asegurar cada papelito que justifique el gasto.
De otra parte, Rivera indicó que la retención para empleados por cuenta propia continuará en 7%, lo que deshizo la posibilidad de aumentar la retención a 10% como se planteó en un momento.
¿Un libro de millaje?
Según el líder de los contadores, lo que deseaba más la gente era que Hacienda eliminara el diario de viajes. El mecanismo de reembolso de gastos de millaje, que es utilizado por miles de asalariados, es práctica común en distintos tipos de empresas. Pero en los círculos contables se sabía que se desarrolló un patrón de abuso en los gastos de auto, y algunas de esas deducciones equivalían a recorrer en auto toda la Isla cada día del año.
El nuevo código contributivo establece que si se quiere deducir ese gasto, se llevará un diario de las millas recorridas, distinguiendo entre los trayectos de índole personal y los de trabajo.
“El informe diario se mantuvo. No se quitó”, dijo Rivera.
Si le consuela, el reglamento para fiscalizar esa deducción permite que, en vez de anotar el millaje cada vez que se monte o se baje del auto, utilice la tabla de millaje establecida por el Departamento de Transportación y Obras Públicas, que de paso está disponible en la Internet.
Más reglamentos
Según Rivera, durante el pasado año, Hacienda terminó de radicar múltiples reglamentos que impactarán la forma en que se llenará la planilla de ahora en adelante.
Solo en diciembre pasado, Hacienda aprobó seis reglamentos para clarificar o implementar el nuevo código, incluyendo la contribución alterna mínima.
Y, en enero, entraron en vigor otros siete reglamentos, incluyendo tratamientos especiales para las cuentas de retiro individual y las anualidades. Este último reafirma las exenciones contributivas que tienen estos instrumentos, pero establece criterios específicos sobre cómo proceder si se trata de pagos a cónyuges y si el patrono otorga beneficios particulares en pensiones o seguros de vida, entre otros aspectos.
Sin embargo, el contador sostuvo que todavía se aguarda por otras disposiciones que afectarán a individuos que participan en sociedades o aportan a organizaciones sin fines de lucro.