20 de febrero de 2012
Infobae.com
Un nuevo estudio identificó que la ubicación del asiento en un avión puede prevenir los riesgos de sufrir una trombosis venosa profunda, también conocida como síndrome de la clase turista.
De acuerdo a la investigación realizada por el Colegio de Médicos Coronarios de Estados Unidos viajar junto a la ventanilla tiene el doble de posibilidades de sufrir una trombosis de vuelo que estar sentado junto al pasillo.
Esto debido a que los primeros disponen de menor movilidad o que evitan para no molestar a otros pasajeros, mientras que los viajeros sentados en el pasillo cuentan con más posibilidades de moverse, así lo publica el diario La Vanguardia.
Para evitar un coágulo sanguíneo en el sistema venoso profundo, la investigación sugiere estiramientos musculares o utilizar medias de compresión graduada debajo de las rodillas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció que la trombosis está relacionada con vuelos largos y que puede prevenirse con la buena ubicación del asiento.
En el foro de las Jornadas Profesionales para Pilotos y Auxiliares de Vuelo se expuso que el padecimiento, independiente a la condición de salud de cada pasajero, representa una incidencia del 3% entre los viajeros.
En caso de emergencia
Tal vez otro de los beneficios de estar sentado junto al pasillo es la supervivencia en caso de emergencia, ya que de acuerdo a un informe titulado Very Large Transport Aircraft (VLTA) Emergency Requirements Research Evacuation Study, asegura que un pasajero tiene más posibilidades de sobrevivir si está sentado en el pasillo a no más de cinco filas de una salida de emergencia.