Doctorshoper
En días pasados se me dañó el disco duro de una computadora portátil ASUS que había adquirido hace 6 meses. Como todo consumidor comencé a hacer las gestiones para la reparación de la misma ya que estaba dentro del término de la garantía original de un año.
Fue en ese momento que comenzó el vía crucis para poder reclamar lo que ASUS había establecido dentro de los términos y condiciones de la garantía. Lo primero que hice fue entrar a la página de internet de ASUS y buscar cuál era el centro de servicio más cercano en el área metropolitana. En la página salió Logitech localizado en la avenida Andalucía #636 en Puerto Nuevo con el teléfono 787-296-4226.
En ese momento comienzo a llamar pero nadie me contestaba y me dio con ir personalmente al lugar y cuando llegué el mismo estaba cerrado. Le pregunto a los comercios aledaños y me indicaron que hacía meses que Logitech había cerrado.
De ahí decido comunicarme con ASUS directamente a través de su número de teléfono 800 para ver cómo podía resolver el problema. La primera vez que llame cometí el error de pedir hablar en español. Le indico a la persona el problema que tenía y que había acudido a Logitech y que el mismo estaba cerrado a pesar que todavía ASUS lo estaba incluyendo como centro de servicio. Luego de una charla me indica que me estaría enviando un email inmediatamente con las instrucciones de que debía hacer. Al cabo de 3 días al no haber recibido el email vuelvo a llamar a ASUS pero esta vez en inglés.
Vuelvo y le explico y me envía inmediatamente un email con las instrucciones y un documento para llevar la computadora para ser enviada a California vía Fed Ex. Acudo con la computadora y el documento a las oficinas de Fed Ex de Guaynabo. Cuando llego me indica el empleado de Fed Ex que el documento de envió no es válido ya que el mismo es para envíos domésticos y Puerto Rico se considera internacional.
Salgo de allí todavía con la computadora dañada y más de una semana dando vueltas. Vuelvo y llamo a ASUS y le explico lo del documento. La alternativa que me brindaron fue que tenía que ir a un centro de servicio que contrataron en Arecibo y llevar la computadora. Fue en ese momento que acudí a la tienda que me la vendió y le dije que me tenían que resolver. Lo que finalmente hicieron. Ir de San Juan a Arecibo cuando tenían un centro en el área metro, para mi… no era viable.
Este ejemplo de lo que me sucedió es uso y costumbre en Puerto Rico. Donde los consumidores en la Isla estamos siendo abusados constantemente al momento de reclamar las garantías ofrecidas por el manufacturero al momento de comprarles sus productos.
¿Cuántos de nosotros compramos algo y cuando hacemos reclamos de garantía y para resolver el problema nos tienen que enviar por ejemplo una pieza, la contestación trillada es: no enviamos a Puerto Rico?
Que se le dañe un televisor y para resolver hay que cambiarle la pantalla. Verán el vía crucis que tiene que pasar el consumidor para que le reparen el mismo. Conocemos de un caso que duró más de dos meses y finalmente le tuvieron que devolverle el dinero de costo de la unidad.
Una modalidad que existe está relacionada con quien distribuye y de dónde es el producto. Si compraste el artículo en una tienda que la mercancía es de los Estados Unidos el proceso de reclamación de la garantía es muy diferente si compran el mismo artículo de un distribuidor de Panamá.
Para muchas empresas de electrónicos Puerto Rico ya no es parte de los Estados Unidos y el proceso de reclamación de las garantías cada vez más se complica en detrimento de los consumidores.
Mientras DACO sale vociferando el reclamo de trato igual al momento de las compras es silente en relación a las garantías.
En www.doctorshoper.com es importante señalar que aunque el establecimiento indique que el término de la garantía con ellos sea uno limitado, si el manufacturero no provee los mecanismos para honrar los términos y condiciones de la garantía estipulada como parte de la compraventa es el establecimiento responsable de responder. A no hacerlo el consumidor podría acudir a DACO y radicar una querella por anuncio engañoso.
Otro detalle, lea bien los términos de las garantías ya que muchas de ellas establecen como política el sustituir el articulo dañado por uno re manufacturado cuyo término de garantía es de 90 días.
Antes de comprar averigüe quién y dónde le horrarán la garantía en caso de un desperfecto. También registre el producto en la página del manufacturero.