31 de marzo de 2021
PrimeraHora
La pandemia del coronavirus ha impulsado un nuevo panorama para la industria automotriz, sintetizada en “una disminución grande” en la reposesión de vehículos y un aumento en las ventas.
La llegada de fondos federales para socorrer a los puertorriqueños de los efectos causados por este mortal virus en la economía parece ser el responsable de los cambios que ha experimentado el mercado de los vehículos, según coincidieron la vicepresidenta de la Asociación de Bancos, Zoimé Álvarez Rubio, y el presidente del Grupo Unido de Importadores de Automóviles (GUIA), Ricardo García.
Para que tenga una idea clara del panorama que se vive en la Isla, basta con destacar que el inventario de autos disponibles para la venta en la Isla “está bien, bien finito”. Según llegan a los muelles, se venden, informó García.
De hecho, de los pocos carros que los bancos recuperaron en el pasado año 2020, que totalizaron 9,409 unidades, solo quedan disponibles para la venta unos 1,916, expuso Álvarez Rubio.
Este panorama de los autos reposeídos contrasta grandemente con los pasados años.
Según la información provista por la Asociación de Bancos, en el 2019 fueron reposeídos unos 15,307 autos, en el 2018 unos 17,017 y en el año 2017, periodo en el que los huracanes Irma y María causaron estragos, alcanzó la cifra de 14,254 unidades.
Cabe destacar que el pico más alto de autos reposeídos ocurrió en el 2014 con 23,319 unidades recuperadas por los bancos.
Para explicar estar cifras, Álvarez Rubio comentó que la baja registrada en autos reposeídos para el 2017 se debió a que “en la época del huracán hubo un periodo de moratoria. Los tribunales, las agencias que reposeen carros y las agencias de cobro no trabajaron por un tiempo y ahí se vio una disminución”.
Explicó, además, que “para la época de los huracanes, muchos de los autos se vieron afectados por inundaciones y demás. Posteriormente, empieza a entrar ayuda económica y pagos de seguros y se empieza a establecer una normalidad en la industria automotriz”.
Pero, llegó la pandemia y todo cambió. Entonces, la cifra de autos reposeídos tuvo su mayor caída.
“Hubo meses en las que estuvo completamente cerrada la industria. Ahora mismo, se ha podido ver el aumento vertiginoso en venta de autos usados y nuevos. Hay personas que se han visto afectadas económicamente, pero también hay un grupo sustancial que ha recibido ayuda, como la de PUA (Asistencia de Desempleo Pandémico), incentivos económicos, los servidores públicos continuaron en la nómina y ha habido una industria que se movió a los servicarros, entregas en su hogar, y esto ha movilizado a la protección del vehículo y una nueva modalidad en el comercio que necesita como herramienta principal un auto, así que hay una conservación del bien, que es primordial para generar unos ingresos. Esto, sin discutir que desgraciadamente se vio sumamente afectado y paralizado el transporte público por meses, más de siete meses por la pandemia”, resumió la vicepresidenta de la Asociación de Bancos.
Otro factor que implicó en esta “baja sin precendentes” en autos reposeídos para el 2020 fue que “hubo una moratoria que aplicó a préstamos de auto concedida por la Resolución Conjunta 26 del 2020, que dio una moratoria para los meses marzo, abril, mayo y junio para préstamos”, explicó Álvarez Rubio.
En resumen, el banco más impactado con la reposesión de autos fue el Banco Popular de Puerto Rico con un 44% de las 9,409 unidades recuperadas en el 2020.
La cifra total de autos reposeídos representó una pérdida de $114,991 para las instituciones que los financiaron.
Álvarez Rubio indicó que todavía no hay datos disponibles del panorama que han tenido las instituciones en los primeros tres meses del año 2021 en cuanto a los autos reposeídos.
Por otro lado, este proceso de reposeer un auto es “acelerado”, pues se trata de un bien mueble.
“La protección del acreedor la compone la propia unidad. Al ser un bien mueble, tiene que ser un procedimiento rápido, porque puede estar dispuesto a desaparecer y el acreedor pierde su garantía, su colateral”, explicó la abogada.
Sepa que la institución que le prestó el dinero decide reposeer un auto si lo deja de pagar por entre 120 a 180 días. En muchas ocasiones, pasa el proceso a una firma legal o a una agencia de cobro.
Hay varias maneras para reposeer un auto, como los es que la persona encargada por el banco llegue a donde esté estacionado y lo ocupa. Sin embargo, Álvarez Rubio indicó que la mayoría de los ciudadanos escogen la entrega voluntaria, una vez dejan de emitir pagos.
En aumento la venta de autos
Para uno de los líderes de la industria automotriz, “la explicación es sencilla” sobre lo que acontece en el mercado.
“Hay más dinero en el bolsillo del consumidor. Entonces, no hay que reposeer un vehículo si puedes pagarlo o si quieres cambiarlo o comprarte uno nuevo, que también lo estamos viendo”, expresó García.
Atribuyó al dinero concedido por el gobierno federal para el desempleo o incentivar la economía, así como unas bajas tasas de intereses, el que la industria automotriz esté “en unos momentos históricos”
“De hecho, hemos llegado a un punto que el inventario está bien, bien finito. En otras industrias es lo mismo. No hay botes, no hay bicicletas”, destacó.
García expresó que no esperaba este auge. Es que los concesionarios de autos estuvieron por varios meses cerrados en el 2020. Esto llevó a una baja en ventas. Por ejemplo, en el 2019 se vendieron 106,000 unidades aproximadamente y en el 2020 unas 95,000. “Una baja de 11% en el mercado”, dijo.
Pero, enero y febrero del 2020 han sido “históricos”. En dos meses se vendieron 21,000 unidades.
“En base a esos meses tan bueno que ha tenido la industria por ese dinero que hay disponible y continuará habiendo hasta septiembre, y otros proyectos que van a estar haciendo aquí con dinero federal, al darse eso, nos hemos encontrado que el inventario está bien, bien bajo, o sea bajísimo”, expuso, al reclamar el fin del impuesto al inventario para evitar que ocurran estas situaciones.
García planteó, además, que se debe buscar un sostenimiento de la economía para evitar que todos esos autos que se están vendiendo no sean reposeídos en el 2022.
“Como país, lo que tenemos que buscar es ese sostenimiento, y buscar el progreso y aprovechar ese dinero que está llegando al país para invertirlo en pequeños y medianos negocios, en poder atraer industrias para continuar el empleo y que pueda haber buena paga para el sector privado. Eso son parte de los criterios que deberían ocurrir para que esto sea sostenible”, manifestó el presidente del GUIA.