27 de septiembre de 2016
Consumer Reports
La batería es el héroe olvidado de tu vehículo, especialmente en climas extremos. ¿Cuáles rinden más?
ULTRACONGELACIÓN
Nuestras pruebas revelan qué baterías de vehículo no te decepcionarán, incluso en las mañanas más frías de invierno. Esta de DieHard es una de las baterías de mejor rendimiento.
Probablemente el único momento en que piensas en la batería de tu vehículo es cuando intentas encender tu auto… y no enciende. Si alguna vez tuviste esa sensación de terror –en el estacionamiento vacío de tu oficina o cuando necesitas llevar rápidamente a los niños a la escuela– recordarás lo importante que es no descuidar la salud de la batería.
La batería del auto moderno realmente es un producto de ingeniería bastante impresionante. La tecnología que le da potencia tiene más de 100 años y solo se le han realizado cambios menores. La mayoría de las baterías duran alrededor de 2 a 4 años en climas cálidos y de 4 a 6 años en climas más templados. Pero en algún momento, todas las baterías llegan al final de su vida útil y tienen que ser reemplazadas.
Evaluamos alrededor de 150 baterías de autos año tras año, generalmente 15 modelos cada 6 meses. Para nuestras evaluaciones, compramos 5 unidades de cada batería en varios comercios. Todas las evaluaciones se realizan en un laboratorio, no en vehículos. Eso garantiza que las condiciones sean constantes y los resultados, repetibles. Evaluamos las baterías en relación con 3 cualidades importantes.
La primera es los amperios de arranque en frío (CCA, por sus siglas en inglés), una medida de la capacidad de la batería de encender un motor en un clima extremadamente frío. Pusimos una batería en un congelador hasta que la temperatura de la batería cayó a 0°F [-18°C] y luego nos fijamos si la batería tenía la mitad de la potencia de CCA que se dice que tiene. Según nuestro Ingeniero de evaluaciones, John Banta, “Realizamos este tipo de evaluaciones para ver si las afirmaciones de las empresas de baterías son exageradas”.
Una segunda medida que revisamos es la capacidad de reserva, que indica por cuánto tiempo puede una batería hacer funcionar el vehículo si falla el sistema de carga – el alternador, estator y rotor. También es una medida del tiempo que puedes dejar prendidos accidentalmente los faros en el estacionamiento del centro comercial y aun así encender el auto sin tener que arrancarlo por otros medios. Para evaluar la capacidad de reserva, nuestros ingenieros se fijan cuánto tiempo lleva descargar una batería totalmente cargada.
Un tercer factor crítico, la vida útil de la batería, se mide al descargar y recargar repetidamente a una temperatura de prueba de alrededor de 167°F [75°C] durante 15 semanas, o hasta que el rendimiento caiga a niveles inaceptables. Cuanto mayor sea el puntaje, la batería será confiable durante más tiempo.
Por eso nuestras Calificaciones están altamente sesgadas en cuanto a longevidad. De hecho, nuestra evaluación de la vida útil conforma la mayor parte del puntaje general. La capacidad de reserva y los amperios de arranque en frío tienen una ponderación menor. También consideramos el costo; nuestros modelos recomendados tienen buenos precios por su rendimiento.
Dicho esto, no todas las baterías de las mejores marcas merecen una recomendación general. RevisaConsumerReports.org/carbatteries para obtener nuestras Calificaciones completas.
1) No compres una batería vieja. Busca el código de fecha impreso en una etiqueta adhesiva en un lado de la batería. Siempre asegúrate de llevarte la más nueva en el estante. Cuando las baterías no se utilizan, pueden empezar a perder su carga. Descifra el código de la manera siguiente: Una batería fabricada en octubre de 2015 tendrá un código numérico de 10-5 o un código alfanumérico de K-5. “A” se utiliza para enero, “B” para febrero, etc. (Se omite la letra “I”). Les aconsejamos a nuestros compradores adquirir baterías que no tengan más de 6 meses, preferentemente 3 meses o menos.
2) Lleva tu batería vieja a la tienda para que se pueda reciclar. ¡No la tires a la basura! Eso es importante porque las baterías contienen plomo y deben desecharse de manera adecuada. Si no llevas contigo tu batería vieja en el momento de la compra, te podrían cobrar una cuota de reciclaje o un depósito de entre $5 y $25.
3) No les des demasiada importancia a las declaraciones respecto de los amperios de arranque en frío (CCA). Los autos modernos con motores de inyección de gasolina controlados por computadoras sólo tardan unos segundos en encenderse. No necesitan las cifras altamente exageradas de CCA que a los fabricantes les gusta poner en los materiales de envasado y publicidad. Tenemos esto en cuenta al ponderar esta medida contra las demás en nuestras evaluaciones.
3 señales de que una batería se está agotando
Para determinar cuánto dura una batería, la cargamos y descargamos miles de veces durante un período de 15 semanas en un baño de agua de 167°F [75°C] para simular las temperaturas bajo el cofre.
Podría sorprenderte saber que la mayor parte del daño a tu batería se produce en el verano, cuando las altas temperaturas aumentan el calor bajo el cofre y aceleran el inicio de las fallas. Si tu batería es vieja, las bajas temperaturas y el aceite del motor más espeso del invierno podrían ser la gota que colma el vaso.
La primera indicación de una falla de la batería podría ser la falta de arranque, pero es posible que no hayas advertido una señal anterior, más sutil. Las señales de una falla inminente incluyen las siguientes:
- Lo obvio: La luz de alerta de la batería aparece en el tablero de mandos de tu vehículo.
- El motor tarda en arrancar cuando giras la llave de contacto.
- Los faros se atenúan cuando no se usa el vehículo.
Esas son las mismas señales de alerta que las de una falla en el sistema de carga o de cables de batería corroídos, lo cual complica las cosas. Si tu vehículo muestra estos síntomas, pide en un taller de reparaciones que se haga una revisión simple de tu batería y sistema de carga. Frecuentemente es gratuita con el entendimiento de que el taller realizará toda reparación posterior. Tu mecánico debería hacer una revisión de la batería y del sistema como parte de todo servicio regular o preparación para el invierno.
Si no es necesario cambiar la batería, puedes llevar un “paquete de arranque” de ion de litio en tu cajuela. El Spirit A8 Car Jump Starter, a $70 tuvo un buen rendimiento en nuestras evaluaciones.
Consigue el tipo correcto
Distintos vehículos necesitan baterías de distinto tamaño, principalmente por el tamaño del motor, las restricciones de espacio bajo el capó y la cantidad de accesorios con suministro eléctrico.
Los motores más grandes requieren más energía para arrancar y, por lo tanto, una batería físicamente más grande. Una batería adecuada para un auto compacto probablemente no tenga la capacidad de encender el motor V8 de una camioneta grande. E inversamente, la batería de esa camioneta probablemente no entraría en el compartimento de motor más pequeño del auto compacto.
Además, los compartimentos de motor abarrotados requieren el calzado de baterías de distintas formas. Algunas baterías se colocan en el maletero, lo cual suscita otras preocupaciones.
Las baterías se clasifican por tamaño físico, tipo y ubicación de las terminales, y el estilo de montaje. El reemplazo de tu batería con una del mismo grupo asegura que la batería entrará en la bandeja y que los cables se conectarán de manera adecuada.
Una vez que conoces el tamaño que necesitas (el número de grupo), elige uno de dos tipos de baterías:
DE POCO MANTENIMIENTO / SIN MANTENIMIENTO
En una época, las baterías requerían que los conductores recargaran periódicamente el agua en el electrolito, la fuente de energía de la batería. Las baterías modernas sin mantenimiento consumen mucho menos agua que las baterías tradicionales de electrolito líquido. En los últimos años, han expulsado del mercado al estilo anterior de batería. (Ya no evaluamos esas baterías).
Las baterías de poco mantenimiento retienen su líquido durante la vida útil de la batería. No hay que quitarles las tapas a los modelos sin mantenimiento.
AGM
Las baterías de separador de vidrio absorbente (AGM, por sus siglas en inglés) contienen una cantidad muy escasa de electrolito ácido, tienen una caja sellada, y utilizan una química interna distinta que reabsorbe las moléculas de hidrógeno sueltas que reaccionan hasta convertirse en agua nuevamente. Esa combinación elimina la necesidad de rellenar los electrolitos, extendiendo la vida útil de la batería.
Estas baterías se dañan menos en caso de una “descarga profunda”, que ocurre cuando dejas prendida accidentalmente la luz interior del automóvil, por ejemplo, en cuyo caso, al girar la llave de contacto sólo escuchas chasquidos de debajo del capó.
Un solo caso de descarga profunda, que cubre los electrodos de placa de plomo de depósitos de sulfato, puede reducir la vida útil de una batería convencional por un tercio o más. Esto hace que las AGM sean una buena opción para los conductores despistados o para vehículos como casas móviles o rodantes que no se utilizan durante períodos largos de tiempo.
Pero esa resistencia tiene un precio, y las baterías AGM pueden costar el doble que las demás. Muchos vehículos de calidad superior vienen con una batería AGM. Nunca reemplaces una batería AGM de equipo original con otro tipo, porque los gases tóxicos emitidos o los electrolitos filtrados por baterías no AGM pueden ser peligrosos si la batería se monta en la cajuela o en el compartimento de pasajeros.
– John Banta