11 de agosto de 2011
El Vocero
Entre sus secuelas, la recesión ha dejado un mercado de autos usados comprimido con el cierre de concesionarios, poca oferta en esta categoría y una amplia demanda. Parecería que encontrar un carro de cierto uso y en buenas condiciones, como estrategia para abaratar costos de compra, ya no resulta tan viable como antes de la recesión, según trascendió ayer durante un conversatorio con representantes de la industria local de autos, organizado por Kia Motors. "El hambre de autos usados ahora mismo en los concesionarios es muy grande y no hay mucho inventario", manifestó Javier Echeandía, vicepresidente de ventas en Optima Auto Solutions, quien aseguró que "ahora es el mejor momento para vender un auto usado". Informó que la tendencia es similar en Estados Unidos y Puerto Rico, síntoma de la recesión, cuando los que tienen autos saldos prefieren aguantarse antes de comprar otra unidad. En Puerto Rico la industria de venta de autos nuevos recién comienza a mejorar tras una caída de los pasados tres años de casi el 50% en general. "Ha habido una merma en la posibilidad de conseguir un auto usado", reiteró Echeandía y explicó que la situación ha provocado cambios en el negocio y ahora los que sobrevivieron en la venta de carros usados han incorporado unidades nuevas para tener presencia de ciertas marcas en sus concesionarios y balancear el inventario que ofrecen al la clientela. La disponibilidad de los usados igualmente se ha reducido debido a la casi desaparición de la alternativa del "leasing" o arrendamiento de autos, una opción de gran popularidad en los 90. Al no haber el flujo de autos que se cambian al poco tiempo de uso, son ejemplares que no llegan al mercado de los usados. "Sobre el leasing, esto se estancó en la Isla y ahora es que está reviviendo en Estados Unidos. Ahora mismo no hay una oferta de este tipo de financiamiento en Puerto Rico y podría revivir", indicó Echeandía. La cautela de los pasados años en la otorgación de crédito por parte de las instituciones financieras igualmente afectó el mercado.