9 de agosto de 2011
Impre.com
Pocas cosas son más desagradables que ver ratas o ratones rondando en nuestro hogar. Pero antes de aniquilarlos, hay que tener precaución en qué y cómo aplicamos un producto para el control de ratas, ya que la seguridad de los niños y hasta de las mascotas puede estar en riesgo. Y precisamente para una mejor protección de los niños, animales domésticos y la ecología, la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos o US EPA, por sus siglas en inglés, anunció recientemente la prohibición de la venta de algunos raticidas tóxicos para uso residencial. Esta medida se tomó debido al alto número de accidentes que ocurren en casa cada año por el uso inadecuado de los raticidas. En un periodo de quince años, entre 1993 y 2008, la Asociación Americana de Control de Veneno recibió entre 12,000 y 15,000 reportes de casos de niños menores de seis años que tuvieron algún accidente por estar expuestos al veneno de raticidas. "Este tipo de accidentes suceden más en casa que en el trabajo o en las escuelas porque se manejan con menos precaución", dice Lina Younes, portavoz de EPA. Los niños son particularmente susceptibles a los envenenamientos accidentales porque tienden a jugar en el suelo y, los más pequeños, exploran el mundo metiendose objetos a la boca. Al usar dichos productos para el control de roedores lo importante es que "no se expongan al aire libre, leer bien las etiquetas con las instrucciones de seguridad y verificar que esos productos estén aprobados por la EPA para el uso en casa", reitera la portavoz de EPA. Younes aclara también que aquellos venenos para ratas en forma de cebo o granulada, que parecían cereales, ya están prohibidos para la venta al consumo público porque "eran demasiado atractivos para los niños y por lo tanto peligrosos". Los raticidas que están formulados con químicos demasiado peligrosos también serán prohibidos para uso residencial. Algunas de las marcas que serán retiradas del mercado son: D-Con, Fleeject, Mimas, Hot Shot y Ronzol. Las recomendación básica para evitar accidentes de envenenamiento en casa a causa de raticidas es "colocar los envases siempre fuera del alcance de los niños y las mascotas. Si pueden estar dentro de armarios que no sean accesibles es mucho mejor. Y no olvidar colocar bajo llave el producto cuando no se esté usando", sugiere la experta de EPA y recuerda a los consumidores que "la protección de su familia está en sus manos". En caso de una emergencia de envenenamiento llame gratis al 1-800-222-1222. Atienden en inglés y en español.