20 de junio de 2011
El Nuevo Herald
Philip Morris U.S. demandó a 17 comerciantes del área de Miami el viernes por vender cigarrillos Marlboro falsificados. Estos comerciantes, ubicados en La Pequeña Habana, Hialeah y Miami Beach, vendían cigarrillos falsos hechos en su mayoría en China, donde hay un conglomerado de fábricas que los elaboran con ingredientes desconocidos y sellos de impuestos falsificados, dijo David Sutton, un portavoz de Altria, la empresa matriz de Philip Morris. "En pocas palabras: el producto simplemente no es auténtico", dijo Sutton. "Usted no sabe qué contienen los cigarrillos, cómo se hacen, dónde se almacenan y quién los distribuye". La venta de cigarrillos falsos ha crecido en Miami desde el 2009, cuando el impuesto estatal subió de 34 centavos a $1.34. El impuesto federal también aumentó de precio en 39 centavos, de 62 centavos a $1.01. Cuando los impuestos aumentan hay mayores incentivos para vender cigarrillos falsos. Al no estar obligados a pagar los impuestos en los cigarrillos de China, lo comerciantes se quedan con la diferencia. De acuerdo con Sutton, Miami y otras ciudades como Los Angeles y Nueva York son el mercado objetivo de estas ventas por cuatro motivos: la tasa de impuestos del estado es alta, son ciudades con una extensa área metropolitana, las tres poseen puertos, y las tres tienen una extensa red de crimen organizado. El proceso de producción y distribución de estos cigarrillos empieza en fábricas no licenciadas ni reguladas, casi siempre en China, un país que puede producir cerca de 400,000 millones de cigarrillos en un año. Los Estados Unidos producen cerca de 350,000 millones de cigarrillos en un año, dijo Sutton. De este modo, los comerciantes encargan los cigarrillos falsos directamente a estas fábricas. Pero también hay empresas criminales que traen estos productos al puerto de Miami y desde allí distribuyen la mercancía a los comerciantes locales. "Puede tratarse de un grupo reducido de personas hasta grupos de crimen organizado", precisó Sutton. "Estos estarían traficando personas, drogas, armas e incluso estarían involucrados en terrorismo". Los comerciantes venden los cigarrillos falsos a precio reducido. Cerca de un millón de éstos fueron vendidos en Miami en el 2010. Sólo en Miami, Florida perdió $1.34 millones en impuestos debido a este comercio. Sutton explicó que Philip Morris y Altria descubrieron los cigarrillos ilegales gracias a una investigación de comerciantes en Miami. Paquetes de cigarrillos fueron adquiridos para identificar las unidades falsas, mediante características de seguridad especiales incluidas en el embalaje de los cigarrillos. Las 17 distribuidoras identificadas son Latin Bakery, Palmer Cafeteria, Granada Liquors, 12 Ave. Sunoco, El Gran Shanghai, Las Palmas Fritauja, AFG Advance Corp., Villa Dollar Discount Corp., DGL Super Cafetería Restaurant, Hellen’s Dollar Discount, Inc., Collins Food Market, 71 St. Liquor, Nasar Supermarket, CLY Minimarket Corp., FAMA Discount and Dollar Store, Latin Café on the Beach y Tamiami Gas, Inc.