24 de mayo de 2011
Primera Hora
Aguadilla.- Podrían sobrepasar de 100 los timados por fraude de venta de autos. Las autoridades se preparan para la avalancha de casos que se cree hay en las regiones judiciales de Aguadilla, Mayagüez y Caguas contra un matrimonio de Hormigueros que desde mediados del pasado año comenzó un esquema de timar a ciudadanos con la venta fraudulenta de autos. El fiscal Miguel Deynes sometió ayer los primeros 46 cargos criminales contra los esposos Abisai Ramos Torres, de 62 años, y Concepción Alemán Requena, de 58 y vecinos de Hormigueros, por los delitos de apropiación ilegal agravada y fraude mediante treta y engaño. La pareja, que estuvo representada por el abogado José Giraud, se allanó a la vista de determinación de causa para arresto ante el juez Rafael Ramos, quien les impuso fianzas que en global alcanzaron los $4.6 millones. Pero, el matrimonio quedó libre bajo fianza a través de la Oficina de Servicios con Antelación al Juicio, que le impuso como condición ser monitoreados con grilletes y restricción domiciliaria. Entre los perjudicados hay comerciantes, profesionales de la salud, un contable, un abogado, entre otros, según confirmó el agente José Grajales del CIC de la región de Aguadilla, donde se identificaron 44 casos. Otros dos casos se levantaron en el CIC de Mayagüez, donde figuran como perjudicados los comerciantes José Acevedo Torres y José Crespo Crespo, quienes entregaron a Ramos Torres $23 mil y $54 mil, respectivamente, para la compra de varios autos y varias plantas eléctricas. El agente Víctor Pérez, del CIC de Mayagüez, dijo que incluso Ramos Torres intentó sin éxito de que él cayera en el pescaíto cuando lo entrevistó como parte de la pesquisa. El timador le ofreció conseguir un auto con poco millaje a un precio muy por debajo del mercado de vehículos. ¿Cómo operaban? El matrimonio les "vendía" bajo treta a las víctimas vehículos que habían supuestamente sido confiscados por el IRS en otras jurisdicciones. Les decían que tenían poco millaje y que los podían conseguir a un precio menor del que se movía en el mercado de autos en la Isla. Para endulzar aún más la "oferta", los perjudicados se creyeron que no tenían que pagar arbitrios en Puerto Rico. Utilizaban un intermediario al que, incluso, le tumbaron $106 y hoy es el testigo estrella del caso. Una vez cerrado el trato, las víctimas debían buscar sus autos nuevos a los muelles de San Juan o a la base aérea Muñiz. Cuando llegaban, los vehículos no estaban ahí. "Este matrimonio indicaba que habían adquirido una subasta del IRS, de vehículos confiscados, y se descubrió que no existen. Alegaron que (los vehículos) estaban en los puertos y no aparecen. Al día de hoy, no se ha devuelto el dinero a los perjudicados, que ya ronda los cerca de $700 mil’’, dijo el agente Grajales. El fraude, agregó, inició con unos acercamientos que hizo el matrimonio en el casino de una hospedería de Mayagüez. Allí les consiguieron clientes potenciales. Las sumas entregadas a la pareja de timadores fluctúan entre los $6 mil y los $106 mil. Las víctimas José Crespo, comerciante dedicado a la construcción de pozos en el área de Aguada, fue una de las víctimas. él le entregó $54 mil a la pareja para comprar tres vehículos, un equipo pesado y cuatro plantas eléctricas. "Pagué en total de $54 mil en distintas fechas, desde el 28 de agosto de 2010, y todavía estoy esperando lo que compré o el dinero. Hace como un mes me di cuenta del pescaíto, porque comenzamos a llamarlo a través de otros amigos y las conversaciones eran pa'alante y pa'atras en la versión, y entonces decidimos acudir a la Policía’’, dijo Crespo. El misionero José Acevedo cayó también en la trampa de estos timadores. El hombre, que además se dedica a construir pozos profundos de agua potable, le dio al matrimonio $23 mil. Y confió porque conocía a Ramos Torres desde hacía años y porque acudían a la misma iglesia en Mayagüez. "Lo conocía y creía que era una persona muy confiable. Desgraciadamente, caí también en este engaño porque le compré una guagua y un camión, por $23 mil, desde agosto pasado y todavía estoy en espera que me los entregue o me devuelva el dinero’’, reclamó. Acevedo dijo que Ramos Torres le decía como excusa que las licencias no estaban al día, que había que esperar, que le diera tiempo, que los vehículos llegaban en algunas semanas. Pero, todavía nada. "Esperamos que se haga justicia aquí en la Tierra y si no que algún día el Señor haga justicia, porque sabemos que la justicia del cielo sí se hará’’, dijo. Gerard Hidalgo de Aguadilla perdió también $6 mil de un "pronto" de $9 mil que dio para adquirir un Toyota Corolla de 2010, con cero millaje, La oferta era tan sabrosa que no lo pensó dos veces, por lo que vendió otro vehículo para darlo de pronto pago. Ahora se quedó sin la soga y sin la cabra. "Yo creo que debe responder por todo el dinero que ha cogido y pagarlo de vuelta... espero recuperar lo que invertí, contando con Dios’’, dijo Hidalgo. Mientras, Carmen Escobar de Acevedo, de Aguadilla, dijo que ha estado orando mucho porque algunos de los perjudicados han intentado hasta privarse de la vida y otros hasta han tenido problemas en su núcleo familiar por los miles de dólares que invirtieron. "Estoy aquí porque el Señor me trajo para que orara y evitara que otros caigan en esto’’, expresó Escobar de Acevedo, cuyo esposo invirtió $15 mil para un auto que nunca llegó. "Estamos aquí porque sé que Dios hará justicia, pero hay muchas familias que están afectadas, hay intentos de suicidio, ha afectado matrimonios y estoy orando mucho para que salgamos gloriosos, porque no se puede creer en nadie’’, añadió.