17 de mayo de 2011
El Nuevo Dia
El corredor ángel Fernando Collazo, que dirige la empresa ACJ Capital Inc., fue acusado por fraude electrónico y fraude en inversiones de bienes este mes en la corte federal de Puerto Rico por engañar a 18 clientes en transacciones con monedas extranjeras. Esta acusación es producto de la querella que radicó la Comisión de Intercambio de Bienes a Futuro (CTFC) contra el corredor. De acuerdo con la CFTC, Collazo operaba su empresa en Salinas y desde allí, se alega que solicitó al menos $1.7 millones de unos 18 clientes para negociar contratos de monedas extranjeras. Como parte del ardid, Collazo y la empresa ACJ también emitió estados de cuenta falsos para ocultar las pérdidas como secuela de las inversiones efectuadas, alega la agencia federal, que busca resarcir a los perjudicados. A esos fines, el juez federal José A. Fusté emitió el 4 de mayo una orden de emergencia para congelar los activos del corredor y prohibir la destrucción de los documentos de la firma. La CFTC es la agencia federal encargada de regular el intercambio de materias primas y de opciones a futuro en los Estados Unidos. De acuerdo con los alegatos de la CFTC, Collazo gestionaba cuentas de inversiones apalancadas en monedas extranjeras, señalando que el programa de su empresa, ACJ, era rentable y que esta poseía la pericia necesaria para gestionarlas. Al hacerlo, Collazo no revelaba plenamente los riesgos de negociar divisas extranjeras. La querella no detalla qué divisas intercambiaba Collazo. Pese a la representación y luego de obtener el aval de los clientes para manejar sus cuentas, la gestión de ACJ resultó en pérdidas constantes, aunque se hacía creer a los clientes lo contrario. "Cuando los clientes de ACJ notaron que sus cuentas mostraban pérdidas, Collazo falsamente les dijo que sus estados de cuenta en línea eran incorrectos por problemas computadorizados", sostuvo la CFTC. Las supuestas acciones fraudulentas de Collazo y ACJ habrían rondado $1.7 millones. No obstante, en una querella relacionada y emitida por la Asociación Nacional de Futuros (NFA), ACJ habría llegado a manejar depósitos ascendentes a $3.5 millones, experimentando pérdidas transaccionales de $2.9 millones y cobrando comisiones en exceso de $1 millón. Los hechos se remontan al año 2008, cuando dos clientes de Collazo radicaron la querella ante la NFA, una organización para la auto-regulación de los profesionales de este negocio en el mundo de las inversiones. Entonces, ACJ solicitaba el negocio de intercambio de divisas a través de la firma Ikon Global Markets. Al gestionar las cuentas, dice la querella de la organización, Collazo liquidaba aquellas transacciones que le resultaban positivas para realizar las ganancias, pero transfería las transacciones que le eran perdidosas para que se proyectaran como "pérdidas no realizadas". En un solo caso, la cliente de apellido Griffen depositó unos $65,000, pero al estar verificar su cuenta en línea tenía unos $103,000, de los cuales unos $100,000 eran "pérdidas no realizadas". Otra inversionista, de apellido Calimano, habría depositado $300,000 en ACJ para febrero de 2008. Nueve meses más tarde su cuenta llegó a totalizar $500,000 y en una sola noche, la cuenta quedó en rojo por $2,000. Según la NFA, no es la primera vez que Collazo encara medidas disciplinarias. Anteriormente, la NFA le disciplinó por ser una "persona asociada" de las firmas First International Commodity Group Inc.; Investor One Financial Corp. y FSG International Inc. A estas firmas, la NFA también las había disciplinado por "prácticas de ventas fraudulentas". Al cierre de esta edición, el abogado de Collazo, Manuel Rodríguez, acalaró que su cliente fue acusado, pero que aún no han emitido veredicto.