4 de mayo de 2011
El Nuevo Dia
Crece cada vez más pese a las prohibiciones y las reglas que le ponen los gobiernos: el mercado de apuestas en internet se rige por sus propios códigos. Con una gama de productos que va desde juegos de póquer hasta casinos virtuales o carreras de caballos en línea, el sector se ha expandido en los últimos tiempos, ajeno a las turbulencias de la economía mundial. Sólo durante 2010, las ganancias globales de las apuestas por internet ascendieron a $29,950 millones, o 12.5% más que el año previo, según estimaciones de la consultora H2 Gambling Capital, que monitorea el sector. "En los próximos cinco años se espera que el mercado de apuestas en línea tenga una tasa de crecimiento anual compuesto de 6.6%", le dijo a BBC Mundo Joel Keeble, jefe de proyectos especiales de H2. A pesar de este futuro promisorio y de la apertura que vive en varios países, el sector mantiene un lado oscuro: un buen número de apuestas se realizan "en negro" y grandes empresas están basadas en "paraísos fiscales". Licencias y prohibición El mapa mundial de las apuestas por internet varía según el modo en el que los países han reaccionado ante este fenómeno. El mayor mercado regional es Europa, donde el Reino Unido, Francia e Italia, entre otros, han dado licencias a las casas de apuestas en línea, a veces rompiendo viejos monopolios pero sin reglas homogéneas en el continente. En España, un proyecto de ley que pasó al Senado regula incluso el patrocinio de las casas de apuestas a equipos de fútbol como Barcelona o Real Madrid y prevé que los clubes cobren por apuestas deportivas en la red. El segundo gran mercado regional es el asiático, indicó Keeble. Pero si se mira la clasificación por países, Estados Unidos sigue al tope de la tabla pese a una ley de 2006 que prohibió la transferencia de fondos a sitios de apuestas en internet desde instituciones financieras. Esto intentó calmar la inquietud de muchos conservadores, que temen que el fácil acceso a un mercado de apuestas desde el hogar tenga efectos perniciosos en los usuarios y sus familias. FBI los tiene en la mirilla No obstante, el mercado estadounidense continúa activo con empresas aún dispuestas a tomar apuestas allí, como sugirió la semana pasada una acusación civil y penal de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) contra tres grandes sitios de internet: Pokerstars,Full tilt Poker y Absolute Poker. Se estima que, cada año, diez millones de personas juegan ilegalmente al póquer en Estados Unidos. La prohibición "no está evitando que los jugadores estadounidenses apuesten", afirmó Keeble. Respecto a América Latina, indicó que la región tuvo ganancias de $796.7 millones el año pasado, una porción marginal del mercado debido a su menor tasa de conexión a internet y un poder adquisitivo más bajo. México es el mayor mercado latinoamericano, pero "Brasil es el país que tiene más potencialidades", añadió el analista. Adaptarse para no morir Las empresas de apuestas en línea también han demostrado su capacidad para adaptarse a la coyuntura. Por ejemplo, casas de apuestas registradas en lugares como Antigua se apresuraron a expandir su oferta en el mercado estadounidense cuando grandes compañías se retiraron debido a las prohibiciones. Las tres empresas de póquer en internet perseguidas por el FBI fueron acusadas de crear falsas corporaciones para recibir pagos de clientes estadounidenses con la excusa de vender ropa, alimentos para animales o palos de golf. Además Joel Keeble, de H2, indicó que varios operadores de apuestas en internet con alcance global están basados en sitios como Costa Rica o Gibraltar, donde encuentran ventajas impositivas. "Hay compañías globales que tienden a tener operaciones en todas partes pero (están radicadas) en paraísos fiscales", dijo. Esto es motivo de una disputa judicial en España, ante un reclamo del grupo español de juegos de azar Codere para que se termine el patrocinio de la empresa de apuestas por internet Bwin al Real Madrid. El argumento de Codere es que Bwin, cuyo logo figura en la camiseta del equipo merengue y en su estadio, incurre en competencia desleal por estar basada en Gibraltar aunque opera en España. Muchas veces, para alcanzar el mercado global, las firmas de apuestas en línea utilizan filiales que canalizan el tráfico en internet, explicó Keeble. Pero agregó que los motores de búsqueda en la red como Google también juegan un papel importante para dirigir a los potenciales consumidores a operadores de apuestas online.