24 de marzo de 2011
El Nuevo Dia
"Este abuso se acabó. Dame tu voto el 4 de noviembre y yo me encargaré de bajarte el agua y la luz. Vamos juntos hacia el cambio". Esa fue la promesa que hizo Luis Fortuño durante su campaña proselitista en el 2008. Un anuncio televisivo en el que aparecía una familia de tres miembros y el padre barajaba las cuentas a pagar para de inmediato soltar la inminente decisión a su esposa: "Este mes no podemos pagar la luz". Acto seguido y ataviado con camisa azul de manga larga y en una toma estilo "close up", Fortuño aparecía en pantalla para asegurar que de convertirse en gobernador bajaría la tarifa de la luz y del agua. Previo a su imagen, un hombre le dice a su esposa tras ver las facturas del agua y la luz: "Este mes no podemos pagar la luz". ¿Habrá cambiado esa realidad para miles de puertorriqueños que mes tras mes se ven obligados a sacrificar el pago de la luz o el agua para cumplir con otras obligaciones porque el dinero no les da? Lo cierto es que Fortuño llegó a la gobernación, pero su promesa no se ha materializado. Al contrario, el costo de la luz ha subido y la única esperanza para que disminuya la factura está, según el gobierno, en la construcción de un gasoducto al que han bautizado con el nombre de Vía Verde. Hay tres factores que prácticamente son inherentes a la factura que le envía mensualmente la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) que hacen imposible que disminuya su consumo por electricidad. Esos factores son el ya conocido ajuste por combustible que incluye a su vez la pérdida de electricidad y subsidios y créditos que se le conceden a municipios y abonados de la AEE, dijo el director de política pública del Centro para la Nueva Economía, Sergio Marxuach. Sólo los incentivos y créditos que otorga la AEE por ley han aumentado a $30 millones en el 2009, precisó Marxuach. "Desde el 2009 para acá (la luz) no ha bajado. Se ha mantenido casi igual por el precio del petróleo. Al subir el costo de su materia prima principal y tener menos ventas (bajaron en un 17% en los últimos años) la única manera (de recuperar lo invertido) es aumentando el precio que nos cobra", dijo Marxuach. Agregó que para que baje el costo de la luz, mientras se sigue dependiendo del petróleo, es necesario reestructurar por completo la AEE.