7 de febrero de 2011

La Opinion

Los ángeles — El porcentaje de estadounidenses con casa propia disminuyó a su punto más bajo desde 1998, dio a conocer el Censo. Según su sondeo de vivienda y hogares, el 65.5% de las personas que forman la nación eran dueños de su propia morada en el cuarto trimeste de 2010, una baja que no se daba desde hacía 12 años, en que cayó a 65.4%.

Las tasas más bajas de propietarios ocurren entre los hispanos, afromericanos y aborígenes americanos. En el caso de los primeros, menos de la mitad —46.8%— eran dueños de un inmueble al finalizar el año.

Sólo los afroamericanos —44.4%— figuraban por debajo.

La tasa para los blancos, siempre en el cuatro trimestre de 2010, fue 74.2%.

La semana pasada el programa de modificación de préstamos de vivienda del gobierno federal, HAMP, dio a conocer que medio millón de personas pudieron renegociar sus hipotecas.

Según expertos, se trata de un logro modesto si se compara con la cantidad de inmuebles que se encuentran en vías de ejecución.

Preeti Vissa, directora de inversiones del Greenlining Institute, calificó de alarmante la tendencia a la reducción de dueños de casas. "Millones de personas están en riesgo de perder sus hogares, y muy pocos han obtenido ayuda. Esto representa una erosión enorme de bienestar en las comunidades latinas y afroamericanas, que para empezar, ya se ubicaban 25 puntos por debajo de los blancos (como dueños de casa)".

Las soluciones a este retroceso, según ella, pasan por crear un programa urgente de reducción de capital -principal. De lo contrario, dijo, las ejecuciones de casas tendrán un efecto catastrófico en la vida de la nación, y sus secuelas seguirán impactando la economía.

"Como va la economía y como van las cosas, es obvio que va a haber menos gente que sea dueña de casa, hizo ver Armando Aceves, un asesor hipotecario independiente de Commerce. Según él, el volumen de los que se van a quedar sin casa no se declara abiertamente aún, debido a que los bancos están deteniendo por el momento la cantidad de propiedades en ejecución.