1 de febrero de 2011
El Nuevo Dia
La presunta estafadora Cristina Parra álvarez, que es buscada por la Policía por ejecutar varios esquemas de fraude y por robar la identidad financiera de personas para luego extraer dinero de sus cuentas bancarias, ha continuado con sus fechorías en el área de San Juan. El relacionista público Paul Díaz Rosado sostuvo ayer que a principios de enero Parra álvarez lo contactó a través de su sitio en la internet para contratar su servicios porque se proponía lanzar en el mercado local un nuevo producto. Según Díaz Rosado, el nuevo producto consistía de una crema batida (whip cream) que contenía una infusión de vodka. "Me pareció un producto nuevo que podría ser atractivo. Ella (Parra álvarez) me pidió que le coordinara un evento de lanzamiento para el producto. Le coordiné todos los recursos que necesitaba. El evento se haría en el establecimiento Atmósfera con la participación de otros auspiciadores. Pero al momento de comenzar a pagar el depósito para poner a caminar el proyecto, comenzó a trastabillar. El proyecto costaba $8,000", dijo Díaz Rosado. El relacionista público dijo que Parra álvarez le indicó que tenía su cuenta bancaria en los Estados Unidos pero no deseaba tener una cuenta en la Isla para evitar el pago de contribuciones allá y aquí. "Ella quería pagar directamente a mis suplidores con "tele checks" (cheques electrónicos), que es un tipo de pago que se efectúa por internet. Pero eso no era para mí aceptable porque estaría yo revelando información de los precios preferenciales que ellos me dan a mí", dijo Díaz Rosado. El relacionista público sostuvo que le propuso a álvarez Parra que utilizara una tarjeta de crédito, pero ella se negó porque, según le dijo, estaba comprando una casa en Guaynabo y si solicitaba una tarjeta de crédito podía perder puntos en su récord crediticio, lo que le afectaría para obtener un préstamo. Agregó que la mujer estuvo a punto de solicitarle su número de cuenta bancaria pero nunca lo hizo. "Sabe Dios lo que hubiera pasado porque yo funciono así. Mis clientes me depositan en mi cuenta cuando estoy trabajando un proyecto con ellos", indicó. Explicó que Parra álvarez le dijo que necesitaba hacer todo rápidamente para poder irse a Estados Unidos a trabajar en Condé Nast ( la empresa de publicaciones donde supuestamente trabaja). Sin embargo, Díaz Rosado dijo que comenzó a descubrir inconsistencias que le lleveron a tener reservas con la nueva cliente, porque mientras alegaba que tenía que regresar a los Estados Unidos deseaba comprar una casa en Guaynabo y, además, se estaba mudando de casa en el área de San Juan. "Ella vivía en la urbanización Parkville y se estaba mudando para Montehiedra. Tenía alquilados tres camiones para hacer la mudanza. El día que tenía previsto mudarse no lo pudo hacer porque no era el día permitido en Montehiedra y se tuvo que ir a la casa de un familiar en Bayamón. El relacionsita indicó que cuando comenzó a exigirle el pago para comenzar a pagar a los suplidores, Parra álvarez desapareció por completo. "Ahora entiendo que lo que ella quería era estafarme a mí y no pudo", dijo aliviado Díaz Rosado. La mujer es buscada por la Policía porque junto a su esposo, identificado como Orlando Aponte, han creado un esquema de fraude en el que la mujer se presenta como representante de ventas de Condé Nast. Presuntamente, la empresa desea hacer negocios en la Isla y necesita alquilar una propiedad que posea piscina, una cocina moderna y otros lujos. Tras acordado el alquiler de la casa, Parra álvarez les presentaba a los arrendadores un formulario que debían llenar para que su compañía realice el pago del alquiler a través del sistema de pago directo. Según la Policía, el formulario requiere el número de cuenta bancaria del dueño de la propiedad. Cuando Parra álvarez obtiene el número de la cuenta, comienza a sacar dinero por medio de transacciones por internet, y además, no paga la casa alquilada. La Policía ha solicitado que si alguien conoce el paradero de Parra álvarez y de su compañero, puede comunicarse a la Comandancia de Bayamón, en el (787) 269-2095.