27 de agosto de 2010
El Nuevo Herald
En la última década, el abuso de las medicinas recetadas se ha elevado a nuevos niveles. Un reciente estudio de la Casa Blanca encontró un aumento de un 400 por ciento en el abuso entre 1998 y el 2008. Otros expertos citan que entre el 2004 y el 2008 se duplicaron las visitas a las salas de emergencia ligadas a las medicinas recetadas. El problema continúa en aumento a escala nacional, a pesar de los programas de supervisión de las medicinas por receta en que está en vigor en 33 estados. Mientras tanto, otros nueve estados han aprobado legislación para establecer tales programas, pero no pueden hallar el dinero para comenzarlos, según la Alianza Nacional para Leyes Estatales Modelo sobre las Medicinas. Florida, donde un condado ha sido etiquetado como la "capital de los analgésicos de la nación', puede ofrecer el ejemplo más destacado de los desafíos que enfrentan los estados. Le tomó tres intentos, pero en el otoño pasado la Legislatura estatal finalmente aprobó un proyecto de ley que establece un programa de supervisión que comenzará a operar en diciembre próximo. Sin embargo, el millón de dólares necesario para iniciar y hacer funcionar el programa no está en el presupuesto. Paul Sloan, director ejecutivo de la Sociedad de Suministradores para el Manejo del Dolor, cabildeó intensamente a favor del proyecto de ley, pero dijo que está defraudado con el resultado. Aparte de la falta de dinero, aduce que la parte "intervencionista' de la industria de manejo del dolor (la parte que trata el dolor con técnicas como la acupuntura) colmó la medida con sus intereses. Estos incluyen requerir que los nuevos médicos que recetan medicinas para el dolor estén certificados en manejo del dolor. El problema de Sloan es que la Florida sólo tiene siete instalacio nes que ofrecen esta certificación a los médicos. El verdadero problema que un programa estatal de supervisión puede prevenir, dijo Sloan, es ‘‘hacer compras con los médicos' (cuando los pacientes obtienen múltiples recetas al ir de médico en médico). "Todas esas personas que están muriendo, compraron o se robaron estas recetas', comentó. "No están muriendo debido a que un médico les diga, ‘aquí hay 250 OxyContin, vaya a casa y trágueselas' '. Pero los legisladores del estado de Washington se enfocaron en cómo los médicos recetan medicinas este año mientras esquivan las regulaciones más estrictas. El representante estatal Jemes Moeller, quien es tambiém un consejero sobre dependencia de sustancias químicas, indicó que el alza en la adicción a las medicinas recetadas le hizo redactar el borrador de la medida. Read more: http://www.elnuevoherald.com/2010/08/26/790304/aumenta-a-niveles-alarmantes-el.html#ixzz0xoIPc1Qp