2 de julio de 2010

El Nuevo Herald

Ya están las cifras finales del valor de las propiedades del sur de la Florida, y estas prometen el presupuesto més severo en años para ciudades y condados.

Pedro García, tasador de la propiedad en el condado Miami-Dade, anunció que los valores cayeron un 13.4 por ciento comparados con el año anterior. La noticia dio que pensar en el condado de Broward, donde el también tasador Lori Parrish, dijo que los valores sujetos a impuestos habían caído un 11.7 por ciento.

Este es el tercer año en que los valores gravables declinan en la Florida, siendo esta la mayor caída hasta ahora. En verdad, el descenso es el peor que se pueda recordar.

La caída brusca lleva a los líderes locales a decidir si cortar los gastos para que se correspondan con los ingresos menores por impuestos, o incrementar los impuestos a la propiedad, también conocido como la tasa de amillaramiento. Ninguna de las dos soluciones es fácil, particularmente cuando un electorado impaciente forcejea con una economía floja, que aún padece un alto índice de desempleo.

``Son tiempos tristes', dijo García. ``No envidio a la Comisión o a ninguna ciudad por las decisiones que tendrán que tomar'.

Los ingresos de muchos gobiernos y las entidades públicas, desde las municipalidades a las juntas escolares y los hospitales de distrito dependen de ingresos que se derivan de impuestos a la propiedad.

Las cifras del jueves --no muy diferentes los estimados preliminares anunciados hace un mes-- les dan a las autoridades impositivas una base para comenzar a preparar el presupuesto para el 1ro. de octubre de este año.

Los dueños de propiedades recibirán sus propuestas de impuestos a la propiedad, o el aviso llamado TRIM, por el correo en agosto. Luego, los líderes locales tendrán hasta finales de septiembre para establecer los impuestos y otros parámetros de gastos para el año.

``Sin sorpresas, continuaremos desarrollando la propuesta de un presupuesto', señaló Vicki Mallett, portavoz de Miami-Dade. El Condado enfrenta un déficit presupuestal de más de $400 millones.

Una razón del déficit: la falta de nuevas construcciones. Hace un año, en Miami Dade, por ejemplo, el declive de la recaudación por concepto de impuestos fue compensado por $8,300 millones en valor gravable recién construido. Pero en el año impositivo más reciente sólo se aumentó $2,600 millones por nuevas construcciones.

Varias ciudades han sido severamente afectadas. Homestead encabeza la lista, con un declive en sus valores a la propiedad de un 31.2 por ciento.

El sur del condado Dade, que se fue por encima durante el boom de la vivienda, cuando los constructores trataron de convertir los campos en ciudades, está ahora salpicado de subdivisiones a medio construir. La caída de este año es mucho más grande que la del pasado, cuando los valores gravables cayeron 24.7 por ciento. El alcalde Steven Bateman dijo que la ciudad ha dejado de contratar y de organizar viajes mientras que consolida algunos puestos administrativos claves.

La ciudad está también persiguiendo unos $8 millones en ingresos por utilidades no recaudadas, el alcalde agregó que los ingresos generados por permisos de construcción han aumentado, aunque lentamente. ``En este momento, no sentimos confiados de que comenzaremos el próximo año, con un mínimo o sin reducción de los servicios', dijo Bateman.

Cerca de Florida City los valores cayeron 23.55%. ``Estas son más malas noticias', dijo el alcalde Otis Wallace.

En otras partes del Sur de la Florida: North Bay Village, los valores de la propiedad fueron recortados un 26.4%, en Cuttler Bay cayeron un 22.7% y en North Miami fue de 20.8%. El total para Miami fue de un 15.3%.

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