4 de junio de 2010

Abc.es

Orlando (EE.UU.), 3 jun (EFE).- Las autoridades del estado de Florida (EEUU) anunciaron hoy la detención de 172 personas, dos de ellas médicos, como presuntos integrantes de una red dedicada al tráfico de medicamentos contra el dolor, cuyo uso indebido es una de las principales causas de muerte en este estado.

El operativo "Pain Killer", como comúnmente se denomina a los medicamentos contra el dolor en Estados Unidos, fue dirigido por el Departamento de Policía de Florida (FDLE) y participaron agentes antinarcóticos federales y de otras agencias policiales locales.

"Estoy satisfecho que esta operación neutralizara a muchos traficantes en el centro y el sur de Florida", dijo hoy Gerald Bailey, jefe del FDLE.

Agregó que harán "más operativos de seguimientos para atacar esta cadena de abastecedores letales en Florida".

Como parte del operativo, los agentes detuvieron a los médicos Michael Moyer, director de la clínica de gestión del dolor que lleva su mismo nombre, y a Roman Mosai, de la Clínica Médica Westside, en el centro de Florida, Ambos están acusados de supuestamente proporcionar prescripciones de medicamentos controlados a por lo menos cien pacientes que, según los investigadores, carecían de enfermedades que requirieran el uso de esas pastillas.

Moyer, de 59 años, fue acusado de dos cargos de tráfico del medicamento hidrocordone, mientras que Mosai, de 62, enfrenta tres cargos por el presunto tráfico de esa misma medicina, un delito grave según las leyes de Florida.

El uso indebido de medicamentos contra el dolor es una de las principales causas de muerte en Florida, de acuerdo con el más reciente informe de la Junta de Médicos Forenses que indica que cada día unas seis personas mueren en este estado debido a una sobredosis de esas medicinas.

La cifra es cinco veces mayor al número de muertos por el uso de drogas ilegales combinadas, de acuerdo a la misma fuente oficial.

Durante los primeros seis meses del año pasado 1.157 personas murieron en Florida a consecuencia de una sobredosis de comprimidos contra el dolor, según el informe del 2009 de los médicos forenses.

Indica además que entre el 2003 y 2008 aumentó un 77 por ciento el número de fallecimientos debido al uso ilegal de prescripciones contra el dolor, tales como las confiscadas por las autoridades policiales hoy, consideradas como sustancias controladas bajo el Reglamento II de la Administración Federal Antidrogas (DEA, en inglés).

Los 172 detenidos en condados del centro y sur de Florida afrontan cargos de tráfico de narcóticos y fueron encarcelados. EFE