30 de abril de 2010

La Opinion

WASHINGTON, D.C. (AP/EFE).— Nuevos automóviles y camionetas deberán tener ‘cajas negras’ en las que se grabe información sobre accidentes, y los fabricantes deberán pagar para financiar las agencias de seguridad del gobierno. Estas son algunas de las propuestas de un panel del Congreso federal en respuesta a los problemas recientes con los vehículos de Toyota.

El Comité de Energía y Comercia dio a conocer ayer un borrador de ley que podría ser la base de una pieza le- gislativa para mejorar la seguridad automotriz y a Agencia de Seguridad Nacional del Tránsito.

Los legisladores se comprometieron al tema después de que la empresa Toyota retiró del mercado más de ocho millones de unidades en todo el mundo y debió pagar una multa récord de $16.4 millones por haber respondido a la crisis con demasiada lentitud.

La legislación, promovida por el presidente del comité Henry Waxman, un demócrata de Los ángeles, eliminará la limitación de multas civiles que puedan imponerse a una firma de automóviles y permitirá que el gobierno ordene un retiro inmediato de un modelo si halla en él un "peligro inmediato de muerte o graves heridas" para los tripulantes.

También requerirá nuevos estándares de seguridad para sistemas de freno, prevenir que los pedales queden adheridos al piso y resguardar los sistemas electrónicos.

Toyota anunció que instalará sistemas de soporte de frenos en todos sus futuros modelos y retroactivamente, en algunos de los ya existentes. El sistema automáticamente desconecta el acelerador al pisarse los frenos.

Lexus Group Vice President Mark Templin said a software update to fix the vehicle stability control system was now available for the GX 460 and dealers had begun contacting customers to schedule repairs. Nearly 10,000 vehicles are covered by the recall.Al mismo tiempo, Toyota anunció ayer que ya desarrolló una solución para el defecto del sistema de control electrónico de estabilidad del todoterreno Lexus GX 460 y que, por ello, reanudó la venta del vehículo.

Lexus (la marca de lujo de Toyota) se vio obligada a suspender las ventas del GX 460 a mediados de abril después de que la revista Consumer Reports calificara el vehículo como un "peligro" y recomendara no adquirirlo.

Mark Templin, gerente general de Lexus, anunció a través de un comunicado que ya "está disponible en los concesionarios de todo el país una actualización del sistema de control electrónico de estabilidad".

Templin también dijo- "Ayer nuestros concesionarios empezaron a contactar clientes para ofrecer la actualización y esperamos que contacten la mayoría de los propietarios de GX en una semana".

A principios de abril, Consumer Reports descubrió durante una serie de pruebas rutinarias realizadas a una velocidad superior a 90 kilómetros por hora que el sistema control electrónico de estabilidad no mantenía al vehículo en línea cuando se producía un giro brusco.

La revista advirtió que "en una situación real eso podría provocar un vuelco y causar lesiones graves o muertes".

El vehículo había salido a la venta hace tres meses y se han vendido unas 5.000 unidades en Estados Unidos.

Consumer Reports plans to test the car again after the fix is installed, the magazine said.