30 de enero de 2010
Primera Hora
El presidente de la organización Limónauto.com, Ignacio García, denunció hoy, viernes, que entre los clientes afectados por el plan de seguridad de la automotriz Toyota "reina la confusión y la frustración" por la falta de opciones legales para remediar los problemas mecánicos de diversos modelos de la marca. Según García, la falta de información precisa por parte de Toyota de Puerto Rico en torno a la disponibilidad de piezas para la reparación de los 23,500 vehículos afectados en la Isla por el retiro masivo anunciado por la compañía esta semana, tiene a muchos consumidores explorando sus opciones legales, pero sin resultados. "La mayoría de los consumidores que se comunican con nosotros quieren saber si existe manera de que puedan exigir la devolución de su dinero o el cambio de la unidad si Toyota se demora demasiado en recibir las piezas necesarias para la reparación de los pedales. Desafortunadamente, sin la 'Ley limón' las opciones son limitadas", dijo García. El presidente de la entidad explicó que bajo la "Ley limón" un concesionario Toyota estaría obligado a recibir para servicio cualquiera de los autos afectados por el retiro en no más de 24 horas del momento que un consumidor lo solicite. En el caso de que el vehículo no esté reparado dentro de 30 días por la falta de disponibilidad de piezas, el consumidor tendría derecho a exigir el cambio de la unidad o la devolución de su dinero. Sin embargo, recordó que el Reglamento de Garantías de Vehículos de Motor del Departamento de Asuntos del Consumidor (DACO) dispone en su regla 21.1 que si un automóvil cubierto por garantía de fábrica presenta un defecto de seguridad, el concesionario está obligado a recibirlo para reparación dentro de 24 horas del momento que un consumidor lo solicite. Si no se culmina la reparación dentro de cinco días, el concesionario le tiene que alquilar un vehículo al consumidor.