15 de diciembre de 2009

Primera Hora

En Teatrolandia unos maleantes entraron por el hueco de un acondicionador de aire e hicieron escante en el taller de la conocida costurera de trajes típicos Carmen Calderón, de 77 años. A pocos pasos de la tienda de disfraces, en el beauty Angie, la dueña, ángela Luciano, y siete de sus clientes fueron rehenes por cuatro horas de unos ladrones que robaron dinero y pertenencias.

En la librería Zona Educativa, en un mismo fin de semana, unos ladrones se robaron dos unidades de aire. En el Laboratorio Córdova, los delincuentes se llevaron equipo electrónico.

El cuadro habla por sí solo. Río Piedras está a merced de criminales. El común denominador entre los casos mencionados anteriormente es que, en todos, los afectados esperan más acción de las autoridades que o no han actuado o lo que han hecho es muy poco.

"Uno se encuentra muy inseguro aquí con la cantidad de deambulantes, que es tremenda. A nosotras se nos han desaparecido vestuarios y nos entraron al taller", narró con voz cansada la dueña de Teatrolandia, Carmen Calderón. La septuagenaria hace lo imposible por tener listos los disfraces navideños que le encargan por orden. Pero, ha tenido que despedir empleados y aún no ha calculado las pérdidas que le ocasionó el robo en su taller.

"Y la Policía brilla por su ausencia", agregó.

Mientras tanto, en la librería Zona Educativa, el gerente Julio Colón comentó que "aquí la cosa está bien mala con el robo de aires y cosas que tengan metales. Hace falta más seguridad en la noche. De día pasan patrullas, pero es cuando casi no pasa nada, de noche no se ve un alma".

En la librería se han registrado pérdidas de casi $4 mil por el robo de dos unidades de aire en un mismo fin de semana. También, al igual que en otros comercios, se ha tenido que reemplazar el cristal de la puerta de entrada ya que los criminales querían tener acceso a la caja registradora.

Por su parte, Christina Hernández, propietaria de la cafetería Herdez e hija de la dueña del Laboratorio Córdova, dijo que espera que con la carta que le enviaron 15 comerciantes a la Policía pidiendo acción haya respuestas rápidas.

En la misma, los comerciantes se quejaron de la prostitución, de los asaltos, de los eventos en que personas han roto cristales de autos para robar y escalamientos en las calles Brumbaugh, Robles, El Pilar, Paseo De Diego y Reverendo Francisco Colón Brunet.

En el establecimiento Queen, donde se hacen uñas acrílicas, Jessenia Valentín dijo que recientemente la cantidad de asaltos se ha disparado.

"Lo malo es que no hay mucho guardia por esta área y de noche también es cuando deberían reforzar la vigilancia", agregó la joven.