20 de noviembre de 2009

El Nuevo Herald

Florida continúa siendo el estado con la dudosa distinción de tener el índice más alto de ejecuciones hipotecarias del país. Una de cada cuatro hipotecas en la Florida estaban en mora o en ejecución hipotecaria, de acuerdo con los datos del tercer trimestre de la Asociación de Bancos de Hipoteca. Nevada le pisaba los talones, con un 23 por ciento.

``El mercado sigue abrumado por muchas ejecuciones hipotecarias', dijo Vincent B. Flor, abogado de Siegfried, Rivera, Lerner, De La Torre & Sobel en Coral Gables, quien representa a asociaciones de propietarios y de condominios en casos de ejecución hipotecaria. ``Todo el mundo anda cargando montones de expedientes [de ejecuciones hipotecarias]. Todos están muy, pero que muy ocupados'.

La crisis de las ejecuciones hipotecarias probablemente se extenderá hasta bien avanzado el año próximo, a medida que el alto desempleo saca a las personas de sus hogares, hunde los precios y suscita preocupaciones sobre la recuperación económica en general.

La evidencia más reciente fue un informe del jueves que muestra que una mayor proporción de préstamos de tasa fija hechos a personas con buen crédito están cayendo en ejecución hipotecaria. Eso es un cambio con respecto al año pasado, cuando los préstamos de alto riesgo fueron los que empujaron a la crisis de la vivienda.

El informe de la Asociación de Bancos de Hipoteca concluyó también que el 14 por ciento de propietarios de vivienda con una hipoteca en toda la nación estaban en mora o en ejecución hipotecaria a fines de septiembre. Fue una cifra récord por el noveno trimestre consecutivo.

Los datos sugieren que el mercado de la vivienda y la recuperación económica en general permanecerán bajo la presión del aumento en moras de hipoteca, especialmente a medida que el desempleo sigue aumentando. La pérdida del empleo es la razón principal por la cual los propietarios están cayendo en mora en sus hipotecas.

Luego de tres años con los precios en picada, el mercado de la vivienda comenzó a recuperarse este verano, lo cual estimuló las esperanzas para la economía en general. Pero los analistas afirman que hay demasiadas viviendas en ejecución hipotecaria que todavía no han salido al mercado, por lo que esperan que los precios puedan bajar aún más.

Los peores daños siguen concentrados en los estados que sufrieron más desde el principio: Florida, Nevada, California y Arizona. Entre los cuatro, abarcaron el 43 por ciento de las nuevas ejecuciones hipotecarias.