11 de agosto de 2009
El Nuevo Dia
La aprobación de $2,000 millones en el Congreso para extender el programa CARS (Car Allowance Rebate System) les permitirá a los conductores puertorriqueños cambiar sus vehículos "chatarras" por autos nuevos eficientes en el consumo de gasolina. El programa ofrece entre $3,500 y $4,500, a los consumidores que adquieran un vehículo cuya diferencia en ahorro de combustible en comparación con su carro viejo sea de entre dos a 10 millas por galón. Su objetivo es estimular la industria de autos y, de paso, reducir el consumo de petróleo para ayudar a evitar daños al ambiente. Contrario a lo que sucedió en días pasados, cuando muchos se quedaron esperando por el incentivo al agotarse los primeros $1,000 millones en tan solo 10 días, concesionarios entrevistados ayer por El Nuevo Día, confirmaron que ya superaron los escollos que impidieron que los consumidores boricuas se beneficiaran de los primeros fondos asignados al programa. Todos los dealers registrados cuentan con sus números de solicitud para reclamar el incentivo y están aptos para realizar sus transacciones. Resultados positivos Pero no sólo los ciudadanos con bolsillos en recesión se beneficiarán con el programa CARS, los concesionarios de autos ven en el mismo, una oportunidad para levantar sus alicaídas ventas. Inclusive, ya hay concesionarios realizando ventas con la ayuda del programa. El más reciente reporte de Automotive Sales Industry Report 2009 reflejó una baja en la venta de vehículos en Puerto Rico de 28.1% en junio, cuando se compara con la misma fecha el año pasado. Durante ese mes, en la Isla se vendieron 6,284 autos, frente a 8,738, en el mismo periodo en el 2008. "No hay duda que el incentivo ha generado un tráfico de público en los concesionarios que antes no existía. Hay mucha gente llamando y visitando los dealers pidiendo información. Haciendo un estimado informal, considero que con el incentivo se podrían vender unos 3,000 vehículos nuevos", indicó Timothy Vélez, gerente de ventas y mercadeo de Suzuki en Puerto Rico. Por su parte, Félix Caratini, director operaciones de concesionarios de Toyota, informó que, aunque hay todavía muchos consumidores que tiene dudas sobre el programa federal, hasta el momento ya los concesionarios Toyota han podido realizar unas 40 transacciones con clientes que se beneficiarán con el incentivo. "Esperamos que durante esta semana podamos realizar algunas 50 ventas adicionales", señaló el director de operaciones de concesionarios de Toyota. ¿Qué pasará con la chatarra? Vélez señaló que todavía queda por solucionarse el tema de la disposición de los vehículos. Como requisito, los concesionarios deben decomisar de los autos viejos productos del intercambio. Hasta la semana pasada ningún almacén de chatarras o "junker" en la Isla, cumplía con los requerimientos federales. Sin embargo, el gerente de Suzuki indicó que la cadena local de junkers Schnitzer ya está en el proceso de certificarse para cumplir con las exigencias federales. "Parte del problema es que muchos de los junkers en la Isla no tienen la capacidad para disponer de algunas partes del auto que contienen mercurio, uno de los requisitos para que sean elegibles", explicó Danielle Vázquez, asesora legal de Bella Group, distribuidores de Honda en Puerto Rico. De igual forma, Vázquez señaló que ya los dealers Honda se encuentran registrados para otorgar el incentivo y orientar a los clientes. Por su parte, Caratini comentó que Toyota identificó a un junker en Quebradillas que está registrado y certificado para acoger los carros usados y destruirlos. Detalles del programa El programa, administrado por la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés) y que entró en marcha el pasado 27 de julio, ofrece entre $3,500 y $4,500 por la compra de un vehículo nuevo. La transacción debe ser a base de un intercambio o "trade in", donde la diferencia en ahorro de combustible entre su auto viejo y el nuevo que planifica comprar debe ser entre dos a 10 millas por galón (mpg), dependiendo la clasificación del auto. Por ejemplo, en un auto de pasajeros si el millaje del auto nuevo es de por lo menos 4 mpg más que el auto viejo, el descuento aplicable será de $3,500. Mientras que si el millaje del nuevo auto supera las 10 mpg por encima del auto viejo, el descuento aplicable será de $4,500. De no saber con exactitud cuál es el consumo de gasolina de su auto viejo puede consultar la página de internet http://www.fueleconomy.gov/ donde aparece el consumo promedio de todos los modelos por año y modelo. En el caso de las SUV o guaguas éstas para aplicar deberán tener un consumo combinado de 18 mpg o menos. Si el millaje de la SUV nueva es de 2 mpg más que el de la guagua vieja, el descuento aplicable será de $3,500. Si supera las 4 mpg entonces será de $4,500. Ayuda mientras haya fondos Por su parte, el gerente de Suzuki resaltó que no se espera que esta vez haya algún problema con la escasez de fondos. "Creo que los $2,000 millones son más que suficientes para que los consumidores que cualifican puedan beneficiarse. Lo único que deben recordar los clientes es que el programa estará vigente hasta el 1 de noviembre, por lo que deberán hacer sus gestiones antes de esta fecha", indicó Vélez. Hasta el miércoles, la NHTSA había desembolsado más de $775 millones del fondo original de $1,000 millones, lo que refleja la venta de unos 185,000 autos.