29 de junio de 2009
Doctorshoper
Los consumidores, debido a la situación económica y la falta de empleo que se está viviendo en el presente, buscan alternativas para hacer dinero desde su casa y esto los podría convertir en víctimas de los esquemas que prometen hacerlos ricos de forma rápida y fácil. Dichos esquemas están tomando auge, a juzgar por la cantidad de correos electrónicos que recibimos en www.doctorshoper.com, como "Google Treasure Chest y Google Search Chest" . Según describe una de las víctimas, quien indicó que había pagado $1.97 por franqueo para recibir una oferta de Google Search Chest, al día siguiente, la compañía le cargo $24.81 a su tarjeta de crédito, la próxima semana le cargo $38.84 y la siguiente le volvió a hacer un cargo de $72.21. El consumidor indica que ninguno de los cargos, luego de haber estado de acuerdo con el $1.97 por el franqueo para un supuesto CD completamente gratis donde incluían las grandiosas ideas de cómo hacerse rico, estaban autorizados. Lo que sucede en este tipo de esquema de fraude es que cuando estos timadores tienen acceso a su cuenta bancaria comienzan a venderles productos o servicios sin la autorización del consumidor. Estos consumidores se sintieron cómodos de ofrecer sus números de cuentas de crédito o bancarias asumiendo que dichos ofrecimientos era de empresas asociadas con la poderosa Google. Cuando la realidad es que a pesar que utilizan el mismo nombre y tipo de letra nada tienen que ver con Google Inc. Según declaraciones hechas por un portavoz de Google a la publicación cibernética Consumer Affairs, indican que no tienen ningún tipo de relación con estos esquemas y que los consumidores tomen las debidas precauciones. La única forma de poder generar ingresos con Google es a través de la propia página de Internet que posea la persona inscribiéndose a los programas Google AdSense y de Google Affiliate Network que son gratuitos. Los negocios inescrupulosos algunas veces abusan de lo que se conoce como "negative option marketing" para vender productos sin el consentimiento del consumidor. Estos timadores lo pueden hacer porque ya poseen la información financiera del consumidor. Si el consumidor, al recibir el estado de cuenta de su tarjeta de crédito encuentra cargos sin su autorización, deben comunicarse inmediatamente con la compañía para hacer sus reclamaciones. En la mayoría de las ocasiones la compañía que genera los cargos no posee evidencia de que se autorizó dicho cargo y la transacción es cancelada. Cuando estos timadores poseen la información de una tarjeta de débito la situación es más problemática. El consumidor deberá reportar y disputar los cargos con el departamento de servicio al cliente del banco, pero lo preferible es cerrar la cuenta y abrir una nueva con un número diferente. Si usted ha sido víctima de este tipo de esquema debe someter una querella en www.ic3.gov que es el portal creado por las autoridades federales para combatir los crímenes cibernéticos.