13 de marzo de 2009

El Nuevo Dia

Un 23% de los empréstitos están en atraso

Los préstamos de construcción en el 2008 totalizaron $6,200 millones en el 2008. De ese total, unos $1,400 millones eran préstamos morosos.

La tasa de morosidad de los préstamos de construcción ha ido en aumento en los últimos años llegando a su cifra más alta en 2008 con un 23%, según datos de la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF).

El valor de los préstamos totales de construcción en la banca al 31 de diciembre de 2008 ascendía a $6,200 millones. De éstos $1,400 millones eran préstamos morosos o "non-performing".

En 2007 la tasa era de 5.72% y en 2006 y 2005, era de un 2.76% y un 1.16%, respectivamente. El comisionado, Alfredo Padilla, reconoció que la situación está impactando a la banca local e incidiendo en su capacidad de generar ingresos.

No obstante, aseguró es cuestión de "tiempo" ya que tanto la banca como la industria de la construcción están trabajando mano a mano para lograr sobrepasar la crisis económica actual.

"Como detrás hay buenas colaterales, es cuestión de que la economía empiece a reactivarse y la banca empiece, como ya lo está haciendo, a reestructurar los préstamos con sus deudores. La gran mayoría de ellos (constructores) salen (de la situación) y se recuperan", dijo.

Entre las estrategias que están siendo utilizadas a esos efectos están las concesiones de desarrolladores en proyectos con unidades acumuladas. Igualmente, ofertas hipotecarias del banco interino tales como ofrecer intereses hipotecarios más bajos.

"Hay que tener en cuenta que la industria de la construcción es una de las más que se afecta cuando vienen estos períodos recesionarios. Y ha ocurrido cíclicamente en las décadas del 70, del 80. En Estados Unidos ha ocurrido igual", apuntó Padilla.

"Al pararse la demanda de parte de los compradores y al no haber menos acceso a crédito, si el consumidor no tiene interés en ese activo, pues, definitivamente se te paraliza el proyecto. Y eso es lo que está ocurriendo con los condominios de alto costo, por ejemplo", sostuvo el funcionario.

Sus expresiones surgieron durante su un seminario auspiciado por la Asociación para Profesionales de Finanzas de Puerto Rico.