30 de diciembre de 2005

Comprar el primer ordenador para un estudiante supone un cuantioso gasto, y considerando que la vida de estos aparatos se acorta debido a que los programas informáticos precisan cada vez más memoria, conviene sopesar detenidamente las necesidades que cubrirá y quién lo usará. Evitaremos así adquirir un ordenador con prestaciones que no se utilizarán y nos aseguraremos de invertir en su compra la cantidad justa.

Antes de comprar un ordenador considere detenidamente qué uso le dará. No se requiere el mismo equipo para escribir o ejecutar programas sencillos que para "abusar" de juegos en tres dimensiones.
El equipo ideal para cualquier estudiante es un sistema multimedia, ya que prácticamente todos los programas orientados al estudiante se basan en el color, la animación y el sonido.
A los más pequeños se les capta mediante el colorido y la música, y a los que son un poco mayores se les atrae a través del vídeo. El ordenador ideal debe ofrecer un fácil manejo para que aprendan a conocer sus ventajas. No es necesario que posea una gran capacidad.
Los estudiantes precisan un equipo que les permita trabajar con facilidad. Debe ser útil para realizar trabajos, ampliar o complementar los textos de los libros a través de la red, para archivar documentos...
Los ordenadores para toda la familia no deben ser excesivamente complejos de modo que faciliten el uso de los más pequeños, pero deben disponer de cierta capacidad para que puedan utilizarlos los mayores de la casa e, incluso, para realizar una actividad semiprofesional.
Potencia y velocidad son otros dos conceptos fundamentales a la hora de comprar un equipo. Las aplicaciones emplean de mucho espacio y memoria. Si no dispone de un ordenador acorde, la sucesión de imágenes se puede volver interminable y aburrir al usuario.
Adquiera un equipo con un procesador de al menos 400-450 Mhz. En lo que a memoria RAM se refiere, debe incorporar 64 Mb. El disco duro debe ser de al menos de 6 Gb para evitar problemas con las aplicaciones y el lector de CD-ROM de 24x como mínimo. Y no olvide el módem para conectarse a Internet.
Decídase por una impresora de inyección de tinta. Aúnan calidad de impresión y velocidad, resultan poco ruidosas y las encontrará a precios asequibles. No obstante, infórmese sobre el precio de los consumibles: una impresora barata puede requerir cartuchos de tinta muy caros.
Altavoces, micrófono y tarjeta de sonido son otros elementos a tener en cuenta.
Facilite el estudio de sus hijos e incluya entre los programas del ordenador una enciclopedia (mucho más fácil de manejar que las tradicionales, permite formular consultas rápidas e incluir los datos obtenidos en sus textos) y un diccionario (los hay bilingües y multilingües, con programas de traducción automática y de aprendizaje de idiomas).

Para acertar en la compra...



Los aspectos a considerar a la hora de comprar un ordenador son las características del equipo, una buena relación calidad-precio, el servicio post-venta y la marca.
No se deje llevar por la primera oferta que vea. Pregunte en varios centros sobre el equipo que más le interesa. Averigue dónde le ofrecen más garantía, cuál es el mejor servicio y si ofrecen facilidades de pago. Encontrará diferencias.
Antes de comprar infórmese de los servicios post-venta. Algunas marcas y distribuidores cuentan con un servicio permanente para ayudar a solucionar los problemas que puedan surgir.
En lo que a marcas se refiere, si bien las conocidas ofrecen una optima garantía, los clónicos constituyen una opción a considerar, ya que son más baratos (aunque la diferencia de precios es menor que hace unos años). Compare el servicio post-venta y las garantías de cada clase de ordenador y decida cuál le convence.
Pregunte si el transporte a casa y la instalación se incluyen en el precio. Algunos establecimientos y marcas cuentan con servicios de ayuda para su instalación. No es difícil hacerlo sin ayuda siguiendo las instrucciones que le indicarán en el establecimiento, pero si usted es "novato" en materia de informática puede encontrarse con dificultades.