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  Por el libro

24 de mayo de 2006

El robo de identidad puede afectar a todos, tal como sucedió recientemente con uno de mis clientes, dueño de un pequeño negocio.

El cliente tuvo que contratar a una persona para manejar su negocio y luego la despidió al descubrir que no estaba haciendo bien su trabajo.

Después de ser despedido, el ex empleado empezó a abrir nuevas cuentas de tarjetas de crédito a nombre de la compañía. Esto le fue fácil porque tenía toda la información necesaria para abrir nuevas cuentas.

El ex empleado tenía acceso a toda la información corporativa así como a la información personal del dueño del pequeño negocio. Obviamente, esto fue un todo un fraude.

El pequeño empresario tuvo que contactar al banco inmediatamente para prevenirle de la situación, tuvo que contratar los servicios de un abogado para que representara a la compañía, me tuvo que contratar a mí para revisar a fondo los registros contables y ver de cuánto se había apropiado el ex empleado de la compañía antes de ser despedido, además tuvo que colocar una "alerta de fraude" en su reporte de crédito para evitar daños futuros, etc. El dueño del negocio se convirtió en una víctima de robo de identidad y los daños emocionales y económicos fueron muchos.

Vamos a hablar de lo que usted puede hacer para evitar ser la próxima víctima de este tipo de delito.

No dé su número de Seguro Social o fecha de nacimiento a menos que sea absolutamente necesario. Ésta es información clave para los ladrones de identidad.

Esté alerta.

Ponga atención ante cualquier correo electrónico que reciba de su banco y de cualquier otro banco que le pida seguir un enlace o suministrarle información. Si la solicitud del banco es legítima, éste le llamará por teléfono o le enviará una carta. Aun si usted recibe una carta de su banco, llame a la sucursal para verificar que la misiva sea legítima.

Asegure su correo.

Si el correo que recibe en su casa o negocio llega a un lugar en el que otro pueden tener acceso a él, no lo deje ahí. La gente se puede robar el correo, robar cheques que pudieran estar ahí y robar su identidad. No es poco común que los adictos a las drogas roben correo sólo para venderlo para mantener su adicción.

Destruya el correo y otros documentos antes de tirarlos.

Sólo con una pieza de información clave los ladrones empiezan a robar su identidad, robarle y arruinar su crédito.

Tan pronto como se entere de este tipo de robo de identidad, coloque una "alerta de fraude" en sus cuentas contactando a una o a las tres agencias de reporte de crédito.

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