13 de junio de 2006
SAN JUAN - El senador estadista Orlando Parga tronó hoy contra la alegada propuesta del presidente cameral, José Aponte, para que se le imponga un arbitrio a los envíos de dinero al extranjero y a las compras por tarjetas de crédito.Para Parga, esas medidas serían un "golpetazo a la pobreza"."Que conmigo no cuenten, si el afán de buscar recursos para solventar la crisis en el gobierno, es echarle la soga al cuello al ciudadano que vive del crédito para sustentar sus necesidades básicas y que se faja de campana a campana, para enviarle un dinerito a sus familiares", manifestó en un comunicado.Parga reaccionó así a informes de prensa que dan cuenta de que Aponte supuestamente está gestando un arbitrio de 10% sobre las remesas de dinero al exterior, otro de 1 a 2% en las compras realizadas con tarjetas de crédito, y un tercero de 10% sobre las propiedades cuyo valor sobrepase el medio millón de dólares.Con esas tres medidas impositivas, Aponte buscaría generar los $400 millones en ingresos adicionales que necesita el gobierno para enfrentar el déficit estructural y cuadrar el presupuesto del próximo año fiscal. "Es inconcebible que queramos convertir a los pobres en pordioseros", expresó Parga al explicar que la mayor parte de los ciudadanos en la Isla depende del crédito para ajustar su presupuesto familiar mensual y para lograr acceder los productos y servicios que complementan su vida diaria.Sobre el envío de remesas, dijo que gran parte de ese dinero, proveniente mayormente de extranjeros que llegaron a Puerto Rico a trabajar dignamente, sirve para pagar medicinas, alimentos y hasta niveles mínimos de albergue y vestimenta en países como Cuba y República Dominicana."Estas medidas atentan contra la calidad de vida y no tendrán cabida ni mayor consideración en el Senado", agregó el senador.