7 de julio de 2006

Phoenix- El estado de Arizona presentó ayer una demanda por fraude al consumidor en contra de Wal-Mart y Autozone en la que las acusa de no colocar los precios cerca de sus productos y hasta cobrar más de los indicado en las etiquetas.

El procurador de Justicia del Estado de Arizona, Terry Goddard, informó que ambas tiendas han sido cuestionadas en varias ocasiones por el Departamento de Pesas y Medidas del Estado de Arizona (DMW) durante los últimos cinco años por discrepancias entre los precios marcados en sus productos y lo que cobraban al consumidor en las cajas.

También, señala la demanda, ciertos productos en aparadores no contaban con un señalamiento sobre su costo en los aparadores en los que se mostraban al público.



"Durante este tiempo ambas tiendas reprobaron más de las mitad de las inspecciones realizadas por DMW", dijo Goddard durante una conferencia de prensa.

Desde el 2001, DMW ha llevado a cabo 846 inspecciones a las 90 tiendas de AutoZone en Arizona, de las cuales 426 tuvieron resultados negativos, mientras que Wal-Mart, la cadena de supermercados más grande en el estado de Arizona, con 70 tiendas, ha sido inspeccionado en 976 ocasiones, fallando en 526.

Debido a esta situación, AutoZone recibió una multa por 170.000 dólares por violaciones a los precios, mientras que Wal-Mart ha pagado más de 450.000 dólares en multas, informó la procuraduría.

"Hemos llegado a la conclusión que para estos negocios, las multas establecidas por el estado se han convertido en un costo adicional para su operación, porque han continuado haciendo exactamente lo mismo", dijo Goddard.

"Nuestro deber es proteger los intereses de los consumidores y esperamos que este proceso sirva de advertencia para otros", puntualizó.