7 de marzo de 2007

En www.doctorshoper.com cuando estábamos escuchando el mensaje del Gobernador Honorable Aníbal Acevedo Vila fue de muy grata sorpresa el anuncio de que a todos los consumidores que realizáramos a través del método de pago directo de la factura se ahorrarían un 10% de la tarifa básica. Por casualidad ese mismo día me había llegado la factura por la cantidad de $186. Inmediatamente calcule y llegue a la cantidad de $18.60. En ese momento dije eso si es un alivio al bolsillo de verdad.

La emoción duro poco ya que cuando me puse averiguar que es la tarifa básica ya que en ningún sitio en la factura lo identifica como tal. Al día siguiente decidí comunicarme a través del 787-289-3434 que es el teléfono de la línea de servicio al cliente de la Autoridad. Al hacer la pregunta  me indicaron que el 10% es de la tarifa básica que es en mi caso $26.71. Eso solo representa un ahorro de $2.67. En ese momento me sentí como si me sucediera un bajón de luz. Ya me extrañaba que el gobernador no diera cifras y si porcientos.
 
Darle acceso a la Autoridad a la cuenta de banco de los consumidores por $2.67 y exponernos a que esa información pudiera no estar protegida adecuadamente o como paso con una compañía de antenas satélite que cuando los meses eran de 31 día como el cierre de facturación eran los días 30 te facturaban dos veces en ese mismo mes y se descuadraba la cuenta de banco.

El hacer ese tipo de anuncio en un mensaje le resta credibilidad al mismo. Si el ahorro no iba hacer significativo, que lo haga la misma autoridad. Pero contaminar un mensaje que contenía propuestas de justicia social  con propuestas vagas con el mero hecho de que las mismas suenen bonitas para las gradas es subestimar a los consumidores puertorriqueños.

En www.doctorshoper.com respaldamos toda medida que represente un beneficio para los consumidores venga de donde venga lo que si no podemos respaldar que nos subestimen. Pero lo bueno que tenemos los consumidores es que aunque la memoria se puede olvidar el bolsillo nunca y en noviembre del 2008 tendremos la oportunidad de consumir con nuestro voto a las personas que queremos que nos representen. Ese día  podemos determinar si los anuncios que nos hicieron a los consumidores fueron engañosos o no.