21 de marzo de 2007

Por: Al Dia Texas

Las compañías de tarjetas de crédito están empezando a sentir la presión del Congreso.

Los demócratas, buscando cumplir su promesa de mejorar la economía de los estadounidenses promedio, se han enfocado en las prácticas de préstamos , especialmente en el área de las tarjetas de crédito.

"El sector de las tarjetas de crédito prospera con la confusión e impotencia de los consumidores para dar poco a los titulares promedio de tarjetas de crédito y hacer cobros exorbitantes a cualquiera que se equivoque, así sea muy poco", dijo el senador Carl Levin, demócrata de Michigan, presidente del Subcomité Permanente de Investigaciones del Senado, que tuvo una audiencia la semana pasada sobre las prácticas del uso de tarjetas de crédito.

Los que emiten tarjetas de crédito se dan cuenta y actúan.

Citi Cards dijo recientemente que terminará su política de "incumplimiento universal", que aumenta su tasa de interés si descubre que se hicieron pagos atrasados en su reporte de crédito. No importaba si había hecho un pago atrasado en esa empresa de tarjetas de crédito en particular.

Citi también indicó que descartará los aumentos a las tasas y cuotas "en cualquier momento, por cualquier razón" para sus clientes.

Chase Card Services, mientras tanto, anunció su "Iniciativa Clara y Sencilla", que incluye expandir su programa para contactar a sus clientes que tengan problemas económicos y recomendar opciones para resolver sus problemas. El banco también dijo que está estudiando formas de hacer sus aclaraciones de datos más claras.

"Estamos viendo nuestras prácticas y la percepción pública y lo que nuestros clientes opinan de las cosas", dijo Paul Hartwick, portavoz de Chase.

Chase también planea ofrecer calculadoras de pagos en línea para ayudar a los clientes a entender cómo afectarán sus pagos de tarjetas de crédito a sus saldos bancarios con el tiempo. Está recordando a sus clientes sobre su capacidad de recibir alertas en línea gratuitas para ayudarles a estar al día con sus pagos.

Capital One presume de no "haber tenido nunca una política universal de incumplimiento".

"Sólo hay una circunstancia en la que un cliente puede estar sujeto a un cambio de tasa de interés: si nos pagan más de tres días tarde dos veces en un periodo de 12 meses", aseguró John Finneran, asesor de Capital One.

Los bancos que emiten tarjetas de crédito por tradición han tomado la postura de decir que pueden aumentar las tasas y cuotas de las cuentas de sus clientes en cualquier momento por cualquier razón, por motivos tan nebulosos como "condiciones generales en los mercados financieros".

Bajo la nueva política de Citi, el banco no aumentará las tasas y cuotas de una cuenta hasta que la tarjeta venza y se emita una nueva, lo que sucede cada dos años.

Cambios son insuficientes

Los defensores del consumidor no se impresionan con las acciones de las tarjetas de crédito.

"Hasta ahora, muchas de las propuestas se centran alrededor de ofrecer más educación al cliente, más aclaraciones y están basadas en la red", dijo Norma García, abogada de Consumers Union. Las empresas de tarjetas de crédito también necesitaban mejorar por sí solas, no sólo después de que los políticos y reguladores empezaran a presionarlas.