3 de julio de 2007

Por: Aldiatx


Si se descubre que una tostadora o juguete son perjudiciales para los clientes, la Comisión de Seguridad de Productos para el Consumidor retira el producto del mercado.


Pero ¿quién protege a los consumidores de productos económicos peligrosos como hipotecas de baja calidad crediticia (subprime) y tarjetas de crédito con jerga incomprensible en sus declaraciones legales?


En un artículo reciente de Democracy: A Journal of Ideas, Elizabeth Warren propone una Comisión de Seguridad de Productos Financieros.


Warren, profesora de la facultad de leyes de Harvard y experta altamente respetada en temas de bancarrota y economía del consumidor, está pidiendo un nuevo régimen regulador para revisar las cuestiones de seguridad del consumidor en ofrecimientos de tarjetas de crédito, hipotecas, préstamos para automóviles y una serie de otros productos financieros.


"¿Por qué hay seguridad para los consumidores cuando compran productos tangibles para el consumidor con efectivo, pero cuando firman para obtener productos financieros de rutina como hipotecas y tarjetas de crédito quedan a merced de sus acreedores?", escribió Warren.


Su Comisión de Seguridad de Productos Financieros establecería pautas para las declaraciones al consumidor, reuniría y reportaría información sobre los usos de varios productos financieros, evaluaría los nuevos productos para cerciorarse de que sean seguros y exigiría la modificación de productos peligrosos antes de que puedan venderse al público.


Las compañías de servicios financieros ya son reguladas por organizaciones como la Reserva Federal, que establece requisitos de reserva para los bancos, y la Corporación Federal de Seguros de Depósito, que asegura los depósitos bancarios.


Pero la revisión de los productos actuales para el consumidor se hace en partes, si es que se hace, asegura Warren.


Por ejemplo, el Congreso ha tenido que presentar una legislación para prohibir que las tarjetas de crédito lleven a cabo prácticas que mantengan a los consumidores atrapados en sus deudas.


Mientras tanto, el Consejo Federal de Reserva propuso enmiendas a las leyes que exigen claridad en los préstamos que exigirían a los bancos que otorgan tarjetas de crédito que hagan declaraciones más comprensibles.


Claro, hay una cosa que no puede lograr ningún regulador u oficina gubernamental, y eso es para protegernos de nuestras malas decisiones económicas. Todavía tenemos que asumir responsabilidad personal.


"La base de los estándares de seguridad no significa que nadie se meterá en problemas financieros", aclaró Warren. "Puedes hacer algo tonto con una tarjeta de crédito.


"Está diseñada para asegurarse de que nadie se meta en problemas por los trucos y trampas que están enterrados hasta la página 37 en un idioma que nadie entiende".