4 de septiembre de 2007

Por: El Nuevo Herald


Acaso quiere el gobierno ayudar a que los propietarios salgan de una hipoteca de alto riesgo en mora? No piense que el Congreso vaya a rescatarlo en un futuro cercano.


Los legisladores tienen muchas ideas y planes --así como audiencias para compartir sus preocupaciones y analizar las culpas--, pero no han llegado a un consenso sobre cómo detener las ejecuciones hipotecarias. En lo único que todos están de acuerdo es que hay que hacer algo.


'Entre uno y tres millones de personas podrían perder sus casas, y no porque se queden sin empleo, ni porque la economía haya colapsado, sino porque hicieron un mal negocio con su hipoteca', dijo el senador Christopher Dodd, demócrata por Connecticut y director de la Comisión de Banca, Vivienda y Asuntos Urbanos.


Los legisladores de ambas cámaras trabajan en diferentes planes para ayudar a los propietarios a salir de la crisis hipotecaria pero ninguno de estos planes parece estar listo para que el presidente George Bush lo firme. Dodd reconoció la situación la semana pasada al solicitar a la Casa Blanca que tome algún tipo de medida, a pesar de todos los proyectos de ley sobre hipotecas que su comisión tiene planeados para el próximo otoño.


'Estos problemas se demorarán un poco más', señaló Dodd.


Pero lo cierto es que el tiempo podría estar acabándose. Los mercados financieros en Estados Unidos y en todo el planeta se han visto estremecidos por temores sobre la propagación de problemas de crédito que comenzaron con las hipotecas de viviendas.


El aumento de mora entre los propietarios ha trastornado los mercados mundiales de crédito porque las grandes firmas financieras y de inversión invirtieron enormes cantidades de dinero en hipotecas de alto riesgo y ahora enfrentan la posibilidad de no poder recuperar su inversión.


La Cámara y el Senado están trabajando en diferentes niveles, pero hasta ahora el plan más avanzado lo tiene el Senado. Los senadores votarán en septiembre sobre el proyecto de ley sobre de los departamentos de Transporte, Vivienda y Desarrollo Urbano.


Muchas hipotecas ya no están en manos de los bancos, de modo que la gente no sabe a quién acudir cuando empieza a meterse en problemas, dijeron los senadores.


'En primer lugar, necesitamos empleados que puedan ayudar a los prestatarios y propietarios de casas a refinanciar cuando se enfrentan a una ejecución hipotecaria inminente y todavía pueden refinanciarlas', expresó el senador Charles Schumer, demócrata por Nueva York, miembro de la Comisión de Banca del Senado. ``Alguien tiene que resolver ese problema'.


Aunque el Senado trabaja en encontrarle una solución al problema, el representante Barney Frank, director de la Comisión de Servicios Financieros de la Cámara, celebrará el 5 de septiembre una audiencia de investigación sobre algunas entidades de calificación de crédito como Standard & Poor's, Moody's Investors Service y Fitch Ratings, que han sido criticadas en muchas ocasiones por no evaluar debidamente el riesgo de los bonos respaldados por hipotecas que se emiten a consumidores con mal crédito.


Entretanto, el viernes pasado el presidente Bush solicitó al Congreso que concentre sus esfuerzos en reformar la Dirección Federal de Viviendas (FHA), una entidad creada durante los años de la Depresión para ayudar a los ciudadanos de ingresos bajos y moderados a que pudieran comprar casas. El año pasado la Cámara aprobó un proyecto de ley para modernizar la FHA, pero el Senado todavía no ha aprobado un proyecto de ley adjunto.


Ese proyecto de ley es una de las prioridades de Dodd para el otoño.


'Estamos analizando varias formas de hacer frente a las entidades de calificación de crédito y la FHA y esperamos tenerlas listas para julio', dijo Dodd. 'Tenemos la esperanza de resolver esto cuanto antes cuando el Congreso regrese a sus labores en septiembre', agregó el senador. Sin embargo, incluso si se aprueba en el Senado, tendría que reconciliarse con el proyecto de la Cámara antes de presentarla a Bush para su firma, algo que pudiera demorar meses.


De igual manera, a algunos demócratas les gustaría ver que gigantes hipotecarios como Fannie Mae y Freddie Mac --que comienzan a recuperarse de graves escándalos de contabilidad-- tengan un un papel más importante en el mercado hipotecario. Algunos quieren que las dos compañías compren hipotecas jumbo de más de $417,000 en áreas del país donde los costos de vivienda son más elevados.


La Cámara aprobó en mayor un proyecto de ley que contempla precisamente eso, pero desde entonces la situación ha empeorado y hay que volver a redactar el proyecto de ley, dijo Frank. 'La crisis en el mercado hipotecario demuestra que deberíamos darle más proridad', agregó Frank.


La mayor parte de los otros proyectos de ley están en etapa de planificación, como ocurre con numerosas medidas para normar y penalizar a los emisores de hipotecas que venden contratos hipotecarios abusivos. Sin embargo, Schumer ha reconocido que eso no ayudaría a nadie que se enfrente ya a problemas con su hipoteca.


'Esto no resolverá nada sobre del pasado, pero evitaría que la crisis empeore porque los agentes hipotecarios siguen abusando de estas personas', observó Schumer.