1 de noviembre de 2007
Por: Primera HoraEs libre mercado.
Las fuerzas del mercado y la actitud que asuman los consumidores será lo que determine la utilización y/o aceptación por parte de los detallistas de gasolina y otros comerciantes de las tarjetas de débito, mejor conocidas como las ATH.
Así lo afirmó ayer el comisionado de Instituciones Financieras, Alfredo Padilla, quien dijo que el Gobierno no tiene jurisdicción para intervenir con los cargos que se imponen y los que acuerdan entre sí los comerciantes y emisores de las tarjetas de débito y crédito.
Recalcó, además, que más de la mitad de las tarjetas de crédito activas en el país son emitidas por bancos del exterior sobre los cuales ni su oficina ni los reguladores estatales en Estados Unidos tienen poder o jurisdicción.
“Además de las leyes y reglamentos federales, a los emisores de tarjetas de crédito de Puerto Rico les aplica la Ley de Ventas a Plazos y Compañías de Financiamiento y el reglamento 6070, que dispone sobre los cargos, tasas de interés y otros asuntos relativos a planes de cuentas rotativas para uso de tarjetas de crédito y contratos de ventas al por menor a plazos”, explicó Padilla.
Aclaró que “esta legislación y reglamentación local no les aplica a los emisores de tarjetas de crédito de Estados Unidos que hacen negocio en Puerto Rico y que están cobijados bajo un charter nacional, quienes exportan sus intereses y cargos a nuestro mercado y sobre los cuales no tenemos alcance regulatorio”.
Precisó ante la Comisión cameral de Asuntos del Consumidor que hay que tomar ese dato en cuenta al momento de regular este sector “porque sólo impactamos a los emisores locales”.
Según Padilla, el aumento decretado por la empresa Evertec sobre las transacciones que realizan los comercios que aceptan sus tarjetas ya está provocando la entrada de otros competidores al mercado y el que algunos bancos estén buscando opciones para sus clientes.
Predijo que eventualmente habrá más alternativas para el consumidor y será éste el que decida cuál servicio utiliza o auspicia.
La Asociación de Detallistas de Gasolina informó que está buscando también opciones para enfrentar el alza en el costo de esos servicios y pidió la intervención de la Asamblea Legislativa en la controversia.
Se quejaron particularmente del hecho de que Evertec les está cobrando más a ellos por su servicio que a otros comerciantes, específicamente los que venden alimentos.
Evertec cambió su sistema de cobro a los comerciantes de un cargo fijo de 10 centavos por transacción a uno porcentual.
“Lo que le pedimos a esta Legislatura y al secretario del Departamento de Asuntos del Consumidor es que, por favor, nos ayuden y conversen con la banca y les expliquen el estado precario de nuestra industria para que podamos mitigar en lo que se pueda ese impacto tan dramático”, expresó el presidente de la Asociación, Jorge Lebrón Otero.
Indicó que Evertec y la banca se equivocan al cobrarles a los detallistas de gasolina el 1.90% de la transacción mientras les cobra a los supermercados 1.75%.
“El margen promedio de un supermercado es de un 20% y el de las estaciones de gasolinas es un 4%”, afirmó, al asegurar que se dialoga con varias instituciones financieras para obtener un alivio y anunciar un acuerdo con un emisor de tarjetas que será respaldado por la Asociación.