7 de marzo de 2008
Por: El VoceroLa crisis inmobiliaria en EE.UU. ha ocasionado una cifra récord de desahucios y ha reducido el patrimonio inmobiliario de los hogares a su menor porcentaje en más de medio siglo, lo que amenaza el consumo y aviva la perspectiva de una recesión.
Las bajadas de los precios de los bienes raíces en la mayor economía del mundo han pasado de ser un número que espanta en el papel a tener consecuencias reales para las familias estadounidenses.
La evaporación de parte de su riqueza, atesorada como plusvalías en sus casas, y la tragedia de las miles de personas que han perdido sus viviendas son malos augurios para el consumo, que ya se ha ralentizado.
El gasto de los estadounidenses genera el 70% del Producto Interno Bruto (PIB) del país, por lo que su freno acerca al país a la contracción económica.