31 de octubre de 2011
Primera Hora
Es el manjar por excelencia de los boricuas, después del arroz con habichuelas. Casi todos deliramos por él, ya sea dulce o salado, frito o hervido, tostado o suavecito. Es, sin duda, uno de los protagonistas principales de la mesa puertorriqueña todo el año. Sí, se trata del plátano. Pero, ojo, estamos en crisis porque escasean, están más caros y encima... ¡más flacos! ¿Quién tiene la culpa? La lluvia que cayó a galones durante el paso de las tormentas Emily, Irene y María, y que dejó bajo agua plantaciones enteras en el llano de Yabucoa. También son culpables los fuertes vientos, que tumbaron matas en pueblos del centro y sur de la Isla. Cabe destacar que la temporada de huracanes termina el 30 de noviembre, o sea, que aún hay que prender velas. Se disparan precios Al tener que suplirse la misma demanda con menos oferta, y porque se acerca una temporada de alto consumo, los precios se han disparado. Lo interesante es que el alza se ha registrado mayormente en el noroeste del país, donde los comerciantes pagan hasta 75 centavos por un plátano, mientras en el sur todavía se consiguen a 50 centavos (aunque algunos productores piden mucho más). Hoy, el consumidor los compra en 80 centavos. Agricultores y comerciantes consultados por Primera Hora explicaron que se está dando el fenómeno de que los suplidores del este y la zona metropolitana están acudiendo al noroeste a comprar los plátanos y los pagan al precio que sea. Los consumidores tradicionales de esa zona se ven ahogados al tener que pagar más por un plátano que, además, es pequeño porque lo cortan antes de tiempo. Daño sustancial Javier Colón, presidente del capítulo este de la Asociación de Agricultores de Puerto Rico y productor de farináceos en Yabucoa, explicó que el viento de las tormentas dobló o tumbó las matas que estaban por parir, provocando que los racimos salieran deformes, pequeños o que no se dieran. El agua quemó las hojas, dañó raíces y, en algunos casos, hasta las semillas. Falta ver cómo saldrán los frutos de las matas parcialmente afectadas. "En el caso mío se supone que desde septiembre yo estuviera produciendo corrido. Al pasar esto (las tormentas), lo que tenía adelantado se fue, eso se perdió completo", señaló Colón, quien perdió la mitad de sus 23 mil matas. Como sus plantaciones están en la jalda, pudo salvar casi toda la semilla de las plantas caídas y las volvió a sembrar. Otros que también salvaron semillas gestionaban sembrarlas en otros municipios. El agricultor comentó que el Seguro Agrícola, así como el Servicio Agrícola del Departamento de Agricultura federal, procesó rápido las reclamaciones de las plantaciones afectadas. ¿Traerán plátanos de afuera? Aunque todos los entrevistados prevén que importarán plátanos antes de Navidad, el vicepresidente de la Asociación de Agricultores de Puerto Rico, Juan Antonio "Toñito" Reyes, cree que eso no ocurrirá este año. "No va a haber la oferta como quisiéramos, pero va a haber plátano", opinó el presidente del sector de farináceos de la Asociación de Agricultura. Con él coincide el secretario de Agricultura, Javier Rivera Aquino, para quien la crisis no llegará sino hasta el año entrante. "El impacto fuerte de la escasez será en febrero y marzo, cuando se noten los estragos de las tormentas", expresó. Al preguntársele por alternativas que su dependencia trabajará para mitigar el problema, indicó que están limpiando los canales de drenaje y las desembocaduras de los ríos. Sugirió a los agricultores que nivelen los terrenos, establezcan barreras de viento y siembren en tierras fuera del valle aluvial de Yabucoa. Para esto, dijo, Agricultura ofrece anualmente un incentivo de 50% del costo del trabajo, hasta un máximo de $8 mil por agricultor. Reyes, de otra parte, mostró preocupación ante el escenario de que se importen finalmente plátanos a la Isla provenientes de la República Dominica porque este fruto que se produce en el hermano país contiene "moco bacteriano". "El ‘moco bacteriano’ es la única enfermedad que no ha llegado a Puerto Rico. Si llegara, aquí se acaba el plátano para siempre. Este hongo no tiene control ninguno", advirtió Reyes.