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En Puerto Rico como consecuencia  de la difícil situación económica que vivimos los consumidores vemos la usura como un antídoto. Según Wiki pedía; El término usura es un término peyorativo que se usa para referirse a los intereses de los préstamos, en general, o cuando los tipos de interés se perciben como desmesurados o excesivamente altos. Todos en algún momento u otro hemos escuchado de lo usurero que es fulano el prestamista.

También hemos escuchado historias de nuestros  antepasados quienes trabajaban como peones en la fincas de los hacendados y como a través de tácticas usureras los mantenían bajo la esclavitud financiera. Lo poco que el ciudadano ganaba por su trabajo en la mayoría de las ocasiones se lo daban en crédito para que lo consumiera en la tienda que poseía el hacendado que le empleaba.  Esto impedía que el trabajador se pudiera liberar de una esclavitud económica.

En el presente vemos como los consumidores están volviendo a caer en una esclavitud económica ya que al existir una limitación de financiamiento  a unos intereses razonables y una merma  en sus ingresos muchos han tenido que optar al usurero para resolver situaciones económicas imprevistas.

Uno de los esquemas de usura que recientemente ha proliferado en Puerto Rico son los llamados “Auto Title Loans”, en español,  prestamos con el Titulo del Auto. Podemos ver como  estos usureros “legales”  aparecen de un día para otro en cuanta esquina de una de nuestra vías de transito. También podemos ver sus anuncios en la televisión dirigidos a consumidores más jóvenes sobre lo fácil que es ir y coger dinero prestado,  “como chuparse un limber”.

Lo que no le dicen a los consumidores en su propaganda es que los intereses a pagar son de usureros y que las probabilidades de pagar dicho préstamo es cuesta arriba ya que cuando cogiste prestados una cantidad y tengas que pagar casi tres veces la misma caísteis esclavo de los usureros.

Estos usureros “legales” surgieron durante la pasada administración de gobierno de una forma muy callada y sin levantar mucho revuelo, como ladrones en la noche. Estos usureros “legales” operan con licencia de casa de empeños que tampoco son unas hermanitas de la caridad que díganos.  También los que están detrás de esto no son el tradicional prestamista del barrio. Según nuestras fuentes los que están detrás son reconocidos “ex banqueros”  cuyas aportaciones “legales” a los políticos del país son de todos conocidos.  Sera por eso que el “Gobierno” se hace de la vista larga.

Un problema adicional que estos usureros “legales”  están creando es en la industria automotriz de la Isla ya que a ser grabado el préstamo en DTOP cuyo sistema de información a los “Dealers” es uno inexistente cuando el consumidor se ve abacoraos al no poder cumplir con el pago del préstamo sale corriendo a cambiar el vehículo dándolo en “Trade In” por otro y al cabo de unos meses es que el “Dealer” se entera que existe un gravamen del vehículo. Conozco de un caso que el préstamo era originalmente de $500 pero el gravamen era de $2,000. Cantidad que tuvo que pagar el “Dealer” finalmente para poder legitimizar su transacción.

En www.doctorshoper.com nos preguntamos lo siguiente:

1. Tendrá la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras la capacidad fiscalizar con el poco personal que posee en la actualidad en el área de fiscalización. En junio se retira el director de la división.
2. Porque nuestros legisladores no le meten las manos al asunto.
3. Porque no se enmienda la publicidad como la de los productos farmacéuticos a que obliguen a los usureros “legales” a indicar los efectos secundarios que conlleva ese tipo de préstamo.

 

En www.doctorshoper.com no creemos ni respaldamos ni recomendamos a que acudan a estos usureros “legales” para coger dinero prestado. No porque estemos chavaos con “J”  tenemos que ser Esclavos  de los usureros.