El Vocero

La falta de un reglamento que explique el proceso completo de la implantación del Impuesto Sobre las Ventas y Uso (IVU) en su origen ha generado una gran incertidumbre entre los comerciantes del país, por lo que desconocen el impacto que pueda generar en sus negocios como en los consumidores.

Los comerciantes entienden que el cobro del IVU en su origen, que inicia el 1ro de julio, pudiese representar un alza en el costo de los productos no por la imposición del cobro en la entrada sino por costos administrativos que pudiesen verse obligados a incurrir, además de los costos que pudiese representar el que la mercancía no llegue a tiempo a sus establecimientos.

 

Waleska Rivera, presidenta de la Asociación de Industriales de Puerto Rico expresó que a escasas dos semanas para el inicio de dicho cobro no existe un reglamento que explique el proceso, lo que les genera una gran incertidumbre. Entiende además, que este cobro en su origen puede generar una congestión en los terminales y los muelles inusual, lo que genera a su vez costos adicionales a los operadores e importadores.  “Se va a implantar en los meses de julio y agosto, fecha donde más altas importaciones se reciben, lo que puede repercutir en demora en procesamiento y levante y esto  a su vez en costos adicionales. En el caso de la manufactura entran los suministros básicos de la industria, donde el no atenderse adecuadamente representará la continuidad de pérdida de competitividad”.

En un sentido muy similar se expresó Manuel Reyes, director ejecutivo de MIDA, quien acepta existir mucha confusión en el proceso y en su implantación, lo que complica el ya complicado sistema regulatorio del país en vez de simplificarlo. “El costo administrativo está por verse. Hablamos de costo de capital, flujo de efectivo y el efecto del IVU pagado en alimentos que posteriormente no se le puede cobrar a consumidores participantes del Programa de Asistencia Nutricional (PAN),  por lo que es dinero que no se puede recuperar. Es poco probable que lo podamos transferir porque se trata de una industria altamente competida”.

 

Enid Monge, presidenta del Centro Unido de Detallistas coincide igualmente en que este impuesto puede representar un encarecimiento en el precio de los productos por los costos incidentales en los que tuviese que recurrir para mantener flujo de efectivo en lo que recupera lo invertido. Mencionó costos de intereses para mayores líneas de crédito, fianza y mayor costo de seguro, entre otros.

Sin embargo el economista Antonio Rosado entiende que en teoría no debe existir ningún tipo de impacto, ya que se trata de mejorar la conexión de los impuestos e incrementar la eficiencia de los sistemas. “El cambio está en que el comerciante que evadía de su responsabilidad ahora tendrá que pagar. El consumidor no tiene problema porque no se trata de un efecto cascada, ya que el pago en su origen tiene crédito por lo que no tiene que ser transferido. Igualmente el costo administrativo es casi nulo porque la cantidad del IVU no es una cifra tan drástica que no pueda ser costeada por el empresario, además de que es una cuantía que le será devuelta en crédito”.

 

El Contador Público Autorizado, Jerry Córdova  entiende que acorde con lo estipulado por Hacienda el comerciante no debe incluir en el precio de venta el IVU pagado ya que el mismo le es devuelto en crédito. Sostuvo que el efecto inicial pueden ser los costos incidentales, los cuales entiende el comerciante transferirá al consumidor en el precio de venta final, acción que sería lo que produciría el efecto cascada.

Antes de la implantación del IVU en el 2006, se estimaba que el efecto de impuesto en los muelles del 6.6%, representaba al final un impuesto de 13% a 14%.

La secretaria de Hacienda, Melba Acosta Febo, dijo por escrito que trabajan arduamente en preparación para el cobro del IVU a todo artículo tributable para la reventa, desde su entrada a  los muelles. Explicó que eso es parte de los esfuerzos de fiscalización y complementa el cobro del impuesto al Uso, en los muelles, que inició en diciembre pasado.

“Obviamente el cobro del IVU a la entrada de la mercancía a Puerto Rico ayudará a reducir la evasión y aumentará el porciento de captación del IVU. Próximamente se estarán informando detalles sobre el progreso de estos trabajos y sobre la operación del sistema.  Estos trabajos incluyen cambios a sistemas tecnológicos, entre ellos el desarrollo del sistema de créditos, enmiendas a la Ley 117 y a reglamentos”. Señaló Acosta Febo.