La Cámara de Dueños de Funerarias de Puerto Rico catalogó de “insensible” la propuesta que elimina la exención del pago del IVU de los servicios funerarios que se realicen en la Isla.

El presidente del organismo, Jorge Lugo Ramírez, dijo que esa medida no afecta a la industria, sino a los “menos afortunados”, a las familias más pobres, que verán un aumento significativo en el costo de los funerales.

La Ley 76 de 2007 eximió del pago del sales tax los servicios funerarios hasta la cantidad de $4,000, así se presten estos de manera combinada o individual.

La gente más pobre en Puerto Rico paga entre $1,800 y $2,000 por un funeral sencillo, que incluye ataúd de metal, recoger el cuerpo, embalsamarlo, obtener el certificado de defunción, una noche de velorio y funeral. Con el pago del IVU, ese costo aumentaría entre $126 y $140, y no incluye ni el pago al cementerio ni el donativo a la iglesia ni las flores.

El dueño de los servicios de cremación Celestium, Carlos Rodríguez, también se expresó en contra de la medida y sugirió que la propuesta debe aplicar solamente a los servicios de lujo. En Celestium tienen un costo básico para las funerarias de $200 y para el público de $795. Con el sales tax, incrementaría entre $14 y $56.

Por su parte, Margarita Velasco, portavoz de la Funeraria Escardille, en Río Piedras, catalogó como “lamentable” la idea.

“Todos nacemos y todos tenemos que morir... este es un gasto en el que no hay opción, como cuando compras ropa. Y aquí tengo clientes que tienen que hacer hasta colectas o buscar ayuda a los municipios porque se les hace difícil costear gastos como este. La gente, por lo general, no piensa en prepararse para gastos de funeral”, dijo Velasco.