Las últimas quiebras de 2015 incluyen a uno de los restaurantes de más tradición en el área de Joyuda en Cabo Rojo, a un semanario en Mayagüez y a una reconocida fonda de Río Piedras, según el más reciente informe del Boletín de Puerto Rico.
El restaurante Raito’s en Joyuda se acogió a la quiebra el 23 de diciembre. En la lista de acreedores figuran el Departamento de Hacienda, Reliable Financial Services, Ballester Hermanos, la Autoridad de Energía Eléctrica, la Corporación del Fondo del Seguro del Estado, Banco Popular, Trafon Group y el municipio de Cabo Rojo. Sin embargo, en la radicación aún no ha divulgado cuánto le debe a cada acreedor ni la suma total de la deuda.
Otro restaurante que radicó quiebra fue El Obrero, localizado en la avenida Barbosa, cerca de la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras. Este fue uno de los negocios que Hacienda embargó en días recientes. Según se informó en comunicado de prensa, El Obrero adeuda $248,000 de IVU y otros $51,000 por diferentes conceptos.
Además, se le impusieron multas por un total de $22,000 por no tener vigente la licencia de destilación, poseer bebidas alcohólicas que no pagaron impuestos, tener bebidas mezcladas que no están de acuerdo con la descripción del envase, tener bebidas sin la rotulación que diga Puerto Rico e Impuestos Pagados y por poseer máquinas o artefactos de entretenimiento sin autorización.
El Obrero radicó bajo el capítulo 11 –Reorganización-, pero tampoco ha divulgado por ahora cuánto adeuda a sus acreedores.
El semanario La Estrella, localizado en Mayagüez y que cubría a la región oeste, también se fue a la bancarrota tras adeudar $308,573. La deuda más grande era con GFR Media, a la que le debe $159,481. Este radicó bajo el capítulo 7, que es Liquidación.
Además, el restaurante oriental J-Taste en la calle Recinto Sur en el Viejo San Juan fue otro de los que se acogió a la protección federal. Su deuda asciende a, por lo menos, $311,700, de los cuales $300,000 se los debe al Departamento de Hacienda. Este radicó bajo el Capítulo 11.