21 de agosto de 2017

El Vocero

El arreglo del techo del hemiciclo senatorial que recientemente reabrió sus puertas luego de permanecer cerrado la pasada sesión, costó poco más de $350 mil, según informó el superintendente del Capitolio, Wilfredo Ramos.

Dejó saber además que una construcción que se realiza a la entrada del anexo del Senado costará otros $136 mil y tiene el fin de mejorar los accesos para personas con impedimentos.

En entrevista con EL VOCERO, dijo que el arreglo del techo del hemiciclo senatorial se hizo con personal de la Superintendencia, pero contó con la asesoría del arquitecto Pablo Ojeda, quien fue contratado para asesorar sobre el proceso de reparación.

El hemiciclo senatorial estuvo cerrado la pasada sesión luego de que a finales del cuatrienio pasado se desprendiera un pedazo del techo falso que recubre el hemiciclo. Las sesiones se realizaron en el Salón Leopoldo Figueroa en el primer piso del Capitolio, donde se habilitó un hemiciclo temporero.

El costo total, dijo el superintendente, fue de $359,634.

“Tomé la decisión de hacerlo con mi personal y se hizo en el periodo de tiempo que programé”, dijo.

“El costo fue por los materiales de todo lo que se hizo ahí. Pintamos las bancas, limpiamos las alfombras, los techos los limpiamos”, agregó.

Sobre los trabajos que se realizan a la entrada del anexo del Senado, dijo que se trata de unas mejoras para garantizar los accesos para personas con impedimentos. Esto, dijo, tendrá un costo de $135 mil.

Arreglo previsto desde 2008

Afirmó que esto era parte de los planes del actual presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz, desde su primera incumbencia en 2008.

“Esto era parte de los accesos que teníamos programados desde ese entonces. Ahora ponemos que es la plaza de los 100 años porque coincide, pero es un área para acceso a personas con impedimentos y hay rampas para personas con impedimentos que antes no existían”, afirmó.

Ramos señaló que “no es un proyecto costoso, es bastante económico. En el Capitolio nunca se vio la importancia de las personas con impedimentos y los accesos; y estamos tratando de que estas personas puedan tener mejores accesos”.

Dijo que uno de los proyectos pendientes desde 2008 es una ‘Plaza de los Creyentes’, pero dijo que la misma no está ahora en planes ni tiene fondos asignados.

Lo “imprescindible”

“Estamos enfocados en las cosas imprescindibles, como los estacionamientos y estos arreglos, más que otras cosas”, dijo.

Agregó que “la plaza no tiene ni siquiera un diseño. Son cosas que estaban como parte programática desde 2008 de proyectos para el distrito capitolino. En el caso de esta plaza, teníamos que mejorar las barreras arquitectónicas, era necesaria”.