28 de marzo de 2022
El Vocero
La inflación, las medidas para mitigar el covid-19 y el embate del constante aumento en el precio del combustible complican el cuadro de solvencia económica de las compañías de transporte médico en la Isla, elementos que representantes del sector no descartan pueda desembocar en la interrupción del servicio.
Según se indicó, para muchas de las compañías de transportación médica en Puerto Rico, la gasolina es el tercer gasto más grande. En el caso de TransCita, el gasto ha representado un aumento de 60%, porcentaje al que se suman otros gastos operacionales que han incrementado en 17.5%.
La empresa puertorriqueña, que comenzó en el 2008, cuenta con 350 vehículos y realizan cerca de dos mil transportes diarios de pacientes que no tienen cómo llegar a las citas, tratamientos médicos y otras gestiones.
“El impacto exponencial que tiene eso (el aumento de la gasolina) es devastador. El problema es que nuestras tarifas son fijas, así que nosotros estamos absorbiendo todo este impacto... una empresa cuyos márgenes son pequeños”, expuso Rafael Vilá Báez, presidente de TransCita.
El empresario indicó que el constante aumento en el costo del combustible “le está poniendo mucha presión a la empresa y nos está llevando casi a un cuadro de números rojos en solvencia económica”.
Desde que estas empresas comenzaron a dar servicio, las aseguradoras no han aumentado la tarifa que pagan a los transportistas, quienes fueron desarrollando estrategias para mitigar el alza en los costos operacionales.
Vilá Báez sostuvo que el impacto de la situación actual “ha sido muy violento”, por lo que temen que haya que tomar medidas que repercutan en deficiencias operacionales que perjudiquen al consumidor.
“Estamos trabajando con los pagadores de los planes médicos para ajustar las tarifas porque todos estos aumentos son reales. No es un capricho lo que estamos pidiendo, simplemente poder hacer el negocio viable y darle continuidad”, detalló.
Tras las reuniones con representantes de las aseguradoras de planes médicos, el presidente de TransCita informó que aunque han entendido la pertinencia de la solicitud, la respuesta que han recibido ha sido tímida. “No hemos logrado cumplir la meta de poder atemperar y ajustar el tarifario para la mitigación de todos estos aumentos”, señaló.
Exhortó al gobierno a tomar en consideración a este sector que vela por el bienestar y la calidad de vida de muchos envejecientes. Además, solicitó a los pacientes que hagan buen uso del beneficio de transportación que reciben.
“Aquí hay unos aumentos violentos, significativos, y para mantener la empresa operando tiene que haber un ‘funding’ (fondos) para esos aumentos. Para mí, el cuadro es uno complicado que tiene solución, pero hay que actuar sobre él”, puntualizó Vilá Báez.
En tanto, Porfirio Rodríguez Martínez, presidente de MedTransport, sostuvo que la principal opción que tiene esta industria es solicitar un aumento tarifario a los planes médicos y descartó que se imponga el cobro de deducible a los clientes, porque no lo considerara justo.
“La única opción es solicitarles a los planes médicos a que considere los altos costos. El plan debería saber que cada ciertos años debería reconsiderar las tarifas que se le pagan a los proveedores de transporte, pero no lo hacen y nos dejan las mismas tarifas por años”, subrayó Rodríguez Martínez.
Precisó que desde que entró a MedTransport, en el 2013, no ha habido aumento a las tarifas. “Habrá que cerrar, porque no da; era con la gasolina a precio normal y daba apretado. Habría que cesar operaciones. Los números son números y si el plan médico no toma acción, eso (en alusión al cierre) pudiera pasar bien pronto”, alertó Rodríguez Martínez.
De ocurrir el cierre por insolvencia financiera, miles de asegurados —en su mayoría personas mayores de 60 años— quedarían desprovistas de los servicios de recogido de recetas, asistir a citas médicas, hacer compras, entre otros servicios.
Reaccionan las aseguradoras
Según se informó a EL VOCERO, los directivos de las aseguradoras están conscientes del impacto del alza en la gasolina en los transportistas, pero no existe un plan para la revisión tarifaria.
La directora ejecutiva de la Asociación de Compañías de Seguros de Puerto Rico (Acodese), Iraelia Pernas, puntualizó que las medidas tarifarias que se tomen quedan a discreción de las aseguradoras y que este tipo de variación en los precios no debe estar incluido en las negociaciones entre seguros y proveedores de transporte.
“Son negociaciones que hacen los aseguradores con los proveedores; en este caso, de transporte médico. En términos de yo poderle decir qué medidas, si alguna, se estén tomando, no tengo la información porque depende de cada asegurador. Realmente estas son oscilaciones de precios que no deben de estar, en estos momentos, contempladas en las tarifas, porque las tarifas están negociadas de antemano, antes de que sucediera esta emergencia”, reaccionó la abogada.
Lara Montilla Byrne, representante de la aseguradora MMM Health, explicó que la empresa se encuentra trabajando con los suplidores de transportación médica para hacer los ajustes pertinentes y mantener el servicio activo para sus clientes. Adelantó que las acciones las establecerán luego de que los suplidores hagan sus respectivos ajustes, aunque no precisó qué medidas tarifarias están dispuestos a tomar.
“En MMM nosotros tenemos un compromiso con nuestros afiliados de que ellos reciban su servicio ininterrumpidamente. Nosotros vamos a hacer todo lo que hay en nuestro poder para asegurarnos de que eso pase; por eso es que estamos trabajando con diferentes suplidores, para estar seguros de que ellos vayan a seguir proveyendo el servicio”, señaló Montilla Byrne.
Por su parte, Triple-S Salud aceptó el impacto que supone el alto precio de la gasolina a los proveedores de transporte médico, pero tampoco dieron detalles sobre qué medida tomarán.
“Reconocemos que el alza en la gasolina ha tenido un impacto en toda la economía y nos mantenemos atentos a las fluctuaciones e impacto en la transportación médica”, expresó en declaraciones escritas a EL VOCERO, Dionnel Pérez, vicepresidente de Gestión de Redes de Triple-S Salud.
En tanto, Roberto Torres, principal oficial de operaciones de MCS, explicó que el servicio de transportación es un beneficio que MCS ofrece como parte de la cubierta médica, y que sus afiliados no pagan tarifas por este servicio.
“Por tal razón, el alza en el costo del combustible no tiene impacto alguno en el acceso de nuestros afiliados al beneficio de transportación. En MCS, continuaremos trabajando con nuestros suplidores y proveedores para asegurar que nuestros afiliados y asegurados reciban todos los servicios que necesitan para mantenerse saludables. Seguimos firmes en nuestra misión de establecer nuevos estándares de excelencia en la industria del cuidado de la salud”, afirmó.
Farmacias con ‘delivery’
Algunas de las farmacias que ofrecen el servicio de entrega a domicilio de medicamentos y otros artículos ya comenzaron a tomar medidas para mitigar el impacto del alza en la gasolina. Tal es el caso de las Farmacias Vázquez, en Cayey, quienes limitaron la cantidad de viajes diarios y consolidaron los choferes de sus dos establecimientos, según expuso Lourdes Bracete, gerente de proyectos de las Farmacias Vázquez.
“Lo que se hace es que se unen los ‘delivery’ de ambas farmacias y se hace solo un viaje por barrio o sector”, detalló Bracete, quien aseguró que a pesar del gasto en combustible continuarán dando el servicio gratuito a los consumidores.