30 de mayo de 2023
El Vocero
Estadísticas de la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF) revelaron que las cifras de compra y venta entre enero y abril del 2023 han disminuido en comparación con los dos años anteriores, lo que especialistas en la industria adjudican principalmente al alza en los intereses y la escasez de inventario disponible.
“Si miramos los primeros cuatro meses del 2023, el mercado de compraventa se redujo en un 17% en comparación con el 2022. Pero, cuando lo vemos contra los últimos cuatro meses del año pasado, solo ha habido una reducción de un 6%. Yo creo que todavía las compraventas se están moviendo. Se están demorando un poco más en vender las propiedades y se debe a las tasas de intereses y la incertidumbre que hasta cierto punto existe”, dijo Luzmarie Vélez Miró, presidenta de la Asociación de Banqueros Hipotecarios (MBA, en inglés).
Según las cifras de la OCIF, entre enero y abril del 2023, el total de préstamos hipotecarios fue 2,637. De estas, 247 fueron viviendas nuevas y 2,390 viviendas usadas. Mientras, que en el 2022 fueron 3,644 (353 nuevas y 3,291 usadas) y en 2021 fueron 4,349 (349 nuevas y 4,000 usadas) durante los mismos cuatro meses.
Por otro lado, han disminuido los precios de venta de las propiedades. “Comparando con los primeros cuatro meses del 2022, el promedio era de $158 mil versus $147 mil en los primeros cuatro meses de este año. Ese promedio de $147 mil es bastante típico para el mercado de Puerto Rico”, explicó Vélez Miró.
Indicó, que durante varios años se observó un notable incremento en el promedio del precio de las propiedades, pero que es positivo constatar que está comenzando a normalizarse. Esto resulta beneficioso, ya que algunas viviendas se vuelven más asequibles, lo que a su vez atrae a un mayor número de compradores cualificados, según la banquera.
A pesar de que Vélez Miró no ve la baja en las cifras como un número preocupante, José “Peter” Torres, banquero hipotecario de Moneyhouse, destacó que las producciones han bajado para todos los bancos “considerablemente, yo diría fácilmente que la producción ha bajado casi un 40% o 50%”.
“Definitivamente, los volúmenes no son los mismos de hace un año por distintas razones. A todos en la banca nos ha bajado por la inflación. Muchos van a decir que el alza en los intereses ha tenido un efecto grande y, aunque lo puede tener, no necesariamente es una razón para atribuirle por completo a la razón por la que ha bajado la producción de todo el mundo”, añadió.
Explicó, que en la época en la que mayores volúmenes se han hecho, los intereses alcanzaban el 7% y ahora pueden conseguir ofertas en 6.5% y hasta un 5.75%, dependiendo del perfil del cliente.
Dependen de ayudas federales
Una de las razones por las que han bajado las cifras es por la poca disponibilidad de viviendas y la paralización de los desarrolladores por los altos costos de construcción y mano de obra.
Sin embargo, destacó las ayudas federales, como el programa de Asistencia al Comprador, como una ventaja para la industria. Según el banquero, estima que más del 60% de la producción de toda la industria hipotecaria está dependiendo del programa.
La semana pasada, el Departamento de Vivienda de Puerto Rico anunció que el Departamento de Vivienda federal (HUD, en inglés) aumentó los límites de ingreso establecidos para recibir las distintas ayudas federales, por lo que más personas podrán cualificar para que se les asista en la obtención de una vivienda.
“Mientras esos ajustes se den, más clientes se podrán beneficiar de las ayudas. En Puerto Rico tenemos clientes sumamente cualificados en términos de crédito, pero carecemos de clientes que tengan la capacidad para ahorrar para el pronto pago y cubrir los gastos de cierre, así que estas ayudas son perfectas y se ajustaron esos límites de ingreso y ciertamente va a beneficiar grandemente la población general de Puerto Rico”, expresó Vélez, presidenta del MBA.
Sobre esto también abundó Melissa Montero, presidenta de la Asociación de Realtors de Puerto Rico, quien indicó que “un empleado municipal, por ejemplo, que gana un sueldo regular, antes ganaba mucho para cualificar para las ayudas como estaban las tablas antes, pero ahora caen dentro de los renglones de los ingresos ajustados. Eso le abre una oportunidad al empleado regular o al ‘household’ que genera 60 mil dólares entre dos personas para que puedan comprar la vivienda con la ayuda”, dijo Montero.
Los representantes del sector consultados concuerdan en que este ajuste de ingresos podría impulsar aumentos en las cifras de compra y venta en los próximos meses.