19 de julio de 2011
El Vocero
Las ventas del regreso a la escuela son una época de bonanza para algunos pequeños y medianos comerciantes que venden en su mayoría efectos escolares. Para los padres es una época de dolor de cabeza por el gasto que representa, pero para la economía no parece tener un efecto significativo a juicio de economistas consultados. No obstante, el más reciente fin de semana, cuando se llevó a cabo la venta de tres días de efectos escolares sin el Impuesto de Venta y Uso (IVU), las tiendas se abarrotaron de clientes para ahorrarse el 7% del impuesto, principalmente los días viernes y sábado. Esta venta se ha convertido en un oasis para los pequeños y medianos comerciantes que interesan que se extienda a más días y no sólo un fin de semana, según el Centro Unido de Detallistas (CUD).? Las ventas del regreso a la escuela resultan buenas para pequeños y medianos comerciantes, pero expertos no ven que reactive la economía. Suministrada. En un sondeo informal que hizo este diario el domingo en el área del Paseo De Diego, en Río Piedras –que es una de las áreas comerciales más concurridas por familias de recursos económicos bajos y moderados–, los padres señalaron que muchas veces el gasto aumenta debido a que tienen que matricular a sus hijos en escuelas privadas. Toman esa decisión –según dijeron– ante la inseguridad que algunos observan en los planteles públicos. Los padres consultados que tenían hijos en escuelas públicas dijeron que en promedio gastan más o menos $200 por hijo en las compras del regreso a la escuela, gasto que va en aumento de año en año. Los que tenían hijos en escuelas privadas indicaron que gastaban entre $1,200 y $2,000 por hijo en las compras, cifra que incluye gastos de matrícula. En Puerto Rico no existe un estudio formal del impacto de las ventas del regreso a la escuela en la economía y cuánto representa el gasto para las familias. Según números del Departamento de Educación en Puerto Rico del 2010 al 2011 se registraron 473,735 estudiantes en planteles públicos. Las proyecciones de la agencia para el año escolar 2011-2012 son de 457,226 estudiantes. No fue posible contactar a la Asociación de Colegios Privados para establecer estadísticas de cuántos estudiantes van a planteles privados. En opinión de economistas consultados, el llamado "back to school" no es más que un evento para incitar al consumo. Según el economista José Joaquín Villamil, el saldo para la economía es muy difícil de calcular. "Hablando del ‘back to school’, mi comentario es que es muy difícil establecer números de lo que se invierte. El ‘back to school’ es otro evento para estimular al puertorriqueño a que consuma más", afirmó el economista, y explicó que los comerciantes aprovechan la ocasión para ofrecer artículos que no tienen nada que ver con la escuela. En la batalla de los comercios por mercadear sus productos –a juicio de Villamil–, se crea otro problema en las familias de escasos recursos económicos que no pueden pagar productos caros o de marca para sus hijos. "Esto tiene otro problema adicional y es que el énfasis en consumir para las familias de ingresos bajos es bien difícil. Los niños de esas familias de bajos ingresos están viendo lo que los niños con niveles de ingresos altos tienen y eso crea una tensión social y eso le pone una presión inmensa a la familia de ingresos bajos", sostuvo Villamil. "Le quitaron el IVU al ‘back to school’ para estimular el consumo. Tenemos que ponernos a pensar si ésa es la manera en debemos hacerlo", cuestionó sobre los tres días sin que se cobre el impuesto. Al igual que Villamil, el economista José Alameda opinó que las ventas del regreso a la escuela no constituyen una inyección para la economía. "Es un tipo de compra regular; no creo que sea una compra extraordinaria; no ayuda a reactivar la economía", indicó. Indicó que –según información publicada– en Estados Unidos se gasta alrededor de $606 billones en las compras del regreso a la escuela. En la Isla no existen estudios formales del impacto económico de este tipo de compra. De acuerdo con datos del Departamento de Hacienda, el fisco deja de recibir entre $8 y $10 millones por las ventas sin el IVU del regreso a la escuela. Esta cifra podría dar una idea de cuánto se gasta en esas compras, pero cabe destacar que se desconoce qué por ciento de las familias hacen sus compras del regreso a la escuela en el fin de semana sin IVU. Comerciantes se las ingenian para "hacer su agosto" No obstante, la venta del regreso a la escuela significa para algunos comerciantes que se dedican a la venta de libros y efectos escolares la mejor época del año. El presidente del Centro Unido de Detallistas (CUD), Ignacio Veloz, dijo que está recibiendo peticiones de parte de los comerciantes para que se amplíe el periodo de ventas sin IVU para efectos escolares que por ley es sólo un fin de semana. Estas peticiones surgen porque en años anteriores tales ventas han sido "bastante buenas", manifestó Veloz. Sin embargo, el presidente del CUD reconoció que las personas son más cautelosas a la hora de comprar. Ahora en busca de rendir el dinero a causa de la crisis económica hacen sus ajustes. "La gente está siendo más cuidadosa con lo que compra y con los precios. Ahora los vas a observar ‘shopper’ en mano", sostuvo Veloz. El CUD no posee información del impacto económico de las ventas del regreso a la escuela. Veloz indicó que algunos socios han expresado que han hecho cambios de horario como abrir los domingos, comprando más cajas registradoras e incitan a los clientes a que hagan "layaway" para que puedan llevarse la mercancía luego cuando tengan el dinero disponible. Estas medidas, reconoció el presidente del CUD, son casi obligatorias para poder competir con las megatiendas.
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