7 de marzo de 2011
La Opinion
El alza en los precios de la comida es un problema que junto la tendencia inflacionaria de la gasolina, empieza a afectar de manera preocupante a los residentes de la Florida Central quienes manifiestan que, en las últimas semanas, comprar comida es tan o más difícil que llenar un tanque de gasolina. Arturo Mata quedó sorprendido esta semana cuando llegó al supermercado Bravo de Apopka y se dio cuenta que los $200 que llevaba para su habitual compra semanal no fueron suficientes para todo lo que normalmente necesita. "No puedo creer que hace una semana yo gastaba $200 en comida para una familia de cuatro que somos y hoy la cuenta llegue a $270. ¿Qué es lo que está sucediendo?",preguntó confundido este padre guatemalteco. A nivel local, los rubros de la canasta básica como el arroz, aceite, derivados del maíz, carnes rojas y blancas, así como como verduras y hortalizas han experimentado aumentos sustanciales que a juicio de Rafael Dume, gerente general y dueño del Compare Supermarket de la Goldenrod Road en Orlando, ha hecho que las familias compren menos comida con el mismo dinero. "Hay quienes hacen su compra normal gastando más. Pero, por lo general, la gente está está comprando sólo lo que le alcanza con el mismo dinero. No todo el mundo puede darse el lujo de gastar más", comentó el comerciante. Dume, detalló que el paquete de arroz de 20 libras, que el mes pasado se vendía en $8.99, hoy no se encuentra por menos de $11.99, la carne de res aumentó 25 por ciento, la de cerdo 30 por ciento, y hortalizas como el tomate, las papas y los pimientos subieron un 15 por ciento en cuestión de semanas. Realidad nacional Junto a que los precios de la gasolina en Florida rozan ya los $3,36 por galón, 20 centavos más que la semana pasada según cifras de la AAA, con tendencia al alza, a nivel nacional el aumento en los precios de la comida también empeoran comparado con el año pasado y desde enero hasta la fecha respectivamente. De acuerdo con el último reporte del Departamento del Trabajo de Estados Unidos (U.S Department of Labor), el índice de precios de la comida en las tiendas (Food at Home Index) incrementó 2.1 por ciento en los últimos 12 meses, el aumento más alto desde la recesión financiera en 2009. Tan sólo en enero pasado, este indicador escaló un 0,5 por ciento, de acuerdo con el reporte. Todos los seis grupos principales de alimentos que se venden en los mercados aumentaron significativamente, entre los que se encuentran las bebidas no alcohólicas (1,5 por ciento), incluyendo café y bebidas carbonatadas, las frutas y vegetales (1,3 por ciento), las carnes, aves de corral, pescado, huevos, pan y cereales (0,9 por ciento). Nadie gana Al consultar con Rafael Dume sobre si el alza de los precios en los alimentos lo beneficiaba de alguna manera, el comerciante confesó ser uno más en la cadena de afectados por el fenómeno, pues sus ganancias en vez de aumentar, merman. "Estamos absorbiendo gran parte de este problema. Uno como comerciante trata de mantener los precios bajos hasta lo que se pueda, y si antes le ganabas 12 por ciento a un producto, ahora tienes que ganarle el 8 para poder mentenerte", aclaró Dume. Esto recae asimismo directamente sobre sus trabajadores a quienes debe restringirle las horas de trabajo para soportar el negocio. Dume agregó que uno de los motivos porque él debe aumentar el precio de los productos es que muchos de éstos provienen de lugares fuera del estado y los detallistas deben pagar cargos extra por efectos de transporte, los cuales ya vienen incluidos en el preció del producto. "No hay manera de que los productos bajen de precio si los precios de la gasolina siguen aumentando. No veo una mejoría inmediata si esta tendencia al alza continúa incrementando", concluyó. No sólo es comida Para Alcides García, los precios de la cesta básica son sólo una parte del problema económico que las familias encfrentan al visitar el mercado, ya que ésta no incluye otros productos que, aun sin ser comida, son de primera necesidad en el hogar. "Si la comida sube, los otros productos también. No hay diferencia, así como sube el arroz, sube la pasta de dientes y los productos de limpieza", dijo García mientras hacía mercado en Bravo Supermarket. Y es que, de acuerdo con datos oficiales del Gobierno federal, el costo de ropa, el calzado, los productos de aseo personal y los de limpieza representan un poco menos de un cuarto del gasto total en los hogares estadounidenses. La tendencia inflacionaria prevé un incremento de estos productos también.