27 de febrero de 2011
El Nuevo Dia
En apenas ocho días, el precio del litro de la gasolina regular ha subido cinco centavos y ya se ubica por encima de los 80 centavos en muchas estaciones en la Isla y el panorama apunta a nuevas alzas. La razón para dicho aumento radica en la crisis política que vive Libia, la que ha ocasionado un disloque en los mercados internacionales de petróleo y sus derivados. El economista Juan B. Román explicó que Libia es uno de los principales productores de petróleo del mundo. "Además de poseer las mayores reservas de crudo del continente africano, produce 1.6 millones de barriles de petróleo diariamente ocupando así el lugar número 16 entre las potencias productoras mundiales", dijo Román. Agregó el economista que su producción se mercadea extensamente en el mercado europeo, y de ahí el efecto que la crisis política ha tenido sobre los precios. El impacto ha sido tal que el precio del barril ya roza los $100, subiendo más de $13 en 10 días. Aunque nadie puede precisar cuándo terminará esta crisis de los países árabes y el norte de áfrica, Román señaló que el alza en los precios de la gasolina no la despinta nadie este año. "Lo que sí debemos señalar es que, independientemente de los resultados de esta crisis, los elementos fundamentales están aún vigentes para que los precios promedio de 2011 sean los más altos desde los registrados en 2008". La explicación para esos aumentos, según el economista, es el incremento esperado en la demanda por combustibles proveniente mayormente de los países emergentes, cuyas tasas de crecimiento se perfilan sobre el 4% durante el presente año. Otra de las razones es que la economía de Estados Unidos se perfila como una de recuperación durante el 2011. "Cuando hay crecimiento económico la producción industrial sube y a su vez se incrementa la demanda por combustibles", manifestó Román. Lo triste es que la gasolina no es lo único que encarecerá tras la crisis en Libia. Los economistas advierten que se aproximan alzas en la factura de energía eléctrica, tan pronto como en marzo, y el precio de alimentos en restaurantes y supermercados también subirá.
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